¿Sabe qué son los alimentos naturales?

Los alimentos se suelen dividir en comida sana y comida basura (los no tan sanos). Sin embargo, la división de los grupos de alimentos va mucho más allá y tiene algunos subtipos.

En principio, la clasificación de producto natural incluye frutas, verduras y legumbres recogidas directamente del árbol, sin pasar por "tratamientos" industriales. Es todo lo que ofrece la madre naturaleza en su forma más pura.

Un ejemplo de la transición de grupos de alimentos puede verse con el maíz. En su forma cruda, es decir, la mazorca recogida directamente del campo de maíz, es un alimento natural. Sin embargo, cuando se procesa, se presenta en latas e incluso se convierte en otro producto, como los aperitivos.

Siga leyendo y comprenda qué hace que un alimento se considere natural, ecológico o procesado.

Más información sobre alimentos naturales

Cada vez vemos a más gente preocupada por la cantidad de grasa, azúcar y calorías de un alimento. Pero casi nunca nos preguntamos si un producto es realmente natural o no. A continuación le explicamos cómo diferenciar cada grupo de alimentos.

Tipos de alimentos

Según la Guía Alimentaria para la Población Brasileña, los alimentos pueden dividirse en 4 categorías, separadas por el grado de procesamiento al que se somete cada alimento.

El tipo de procesado es un factor determinante en el perfil nutricional y el sabor de los alimentos que vamos a consumir. En general, se puede decir que cuanto más procesados están, menor es su valor nutricional y la probabilidad de que el producto esté lleno de compuestos químicos es enorme.

Por lo tanto, cuando aprendemos a diferenciar entre cada grupo, adquirimos el conocimiento y el poder de elegir los mejores hábitos alimentarios.

Alimentos naturales

Los alimentos naturales, o in natura, son los más frescos. Se obtienen directamente de plantas o animales y no se someten a ningún tratamiento que altere su forma o composición.

Por lo tanto, se venden tal y como se recogieron de la naturaleza, y suelen encontrarse en ferias, tiendas de comestibles y establecimientos hortícolas. Esta categoría incluye verduras, hortalizas, frutas, tubérculos, frutos secos y nueces (aún con cáscara). También se incluyen la carne fresca y los huevos.

Alimentos mínimamente procesados

Los alimentos mínimamente procesados incluyen productos naturales que han sido sometidos a pequeños procesos que no los alteran. Se considera la segunda categoría más saludable, un verdadero atajo para ahorrar tiempo en la cocina.

Aquí, los alimentos pueden someterse a procesos de limpieza, eliminación de partes no comestibles, segmentación, trituración, secado, fermentación, pasteurización, refrigeración o congelación. Los procesos no implican la adición de sal, azúcar, aceites o grasas.

El procesamiento mínimo hace que los alimentos sean más accesibles, seguros y convenientes. Este grupo incluye frutos secos pelados, cereales, tés, café, agua del grifo y embotellada, así como verduras, legumbres, frutas, raíces y tubérculos lavados, cortados y congelados.

Ingredientes culinarios e industriales

El grupo de ingredientes culinarios e industriales está formado por sustancias que se extraen de la naturaleza y luego se purifican mediante algún tipo de procesamiento.

Entre los procesos a los que se someten los alimentos, encontramos la molienda, el refinado, la hidrogenación, la hidrólisis, así como el uso de enzimas y aditivos. La principal diferencia con los alimentos mínimamente procesados es que aquí se produce un cambio radical con respecto al alimento original.

Además, estos productos no se consumen solos, sino que se utilizan para diversas preparaciones, como caldos, sopas, ensaladas, tartas, panes, pasteles, dulces y conservas. También son ingredientes fundamentales para la producción de alimentos ultraprocesados.

Almidones, harinas, aceites, grasas, sales, edulcorantes, fructosa, jarabe de maíz, lactosa y proteína de soja son los representantes más conocidos de esta categoría.

Alimentos procesados

Los alimentos procesados son aquellos en los que se añade sal, azúcar u otra sustancia a los alimentos naturales para hacerlos más duraderos y sabrosos. Suelen consumirse como guarnición.

Los alimentos procesados más conocidos son los enlatados, como zanahorias, pepinos, guisantes y cebollas. También destacan los extractos de tomate, las frutas confitadas y en almíbar, las carnes curadas, el pescado en conserva (sardinas y atún), los quesos y algunos tipos de panes más sencillos.

Otro ejemplo son los palmitos, que deben conservarse en salmuera acidificada con conservantes. Además, deben someterse a esterilización para eliminar las esporas de la bacteria del botulismo, una enfermedad que puede ser mortal.

Alimentos ultraprocesados

El grupo de alimentos ultraprocesados incluye los productos listos para el consumo. Presentan una receta industrial, elaborada con sustancias extraídas de los alimentos (aceites, grasas, azúcar, almidón, proteínas) y derivados alimentarios (grasas hidrogenadas y almidón modificado).

Además, a menudo contienen compuestos sintetizados en laboratorios, a base de materiales orgánicos como el petróleo y el carbón, que son los colorantes, aromatizantes, potenciadores del sabor y aditivos utilizados para hacer el producto más atractivo y darle una vida útil más larga.

Las técnicas utilizadas aquí incluyen la extrusión, el moldeado y la preelaboración (fritura u horneado). Esta categoría incluye la mayoría de los panes, barras de cereales, galletas, salchichas, pasteles, helados y refrescos.

Los platos precocinados congelados como pasta, salchichas, patatas fritas, nuggets, sopas deshidratadas, preparados para lactantes y alimentos infantiles también son ultraprocesados.

¿Por qué empezaron a procesarse los alimentos?

Al principio, el principal objetivo de la transformación de alimentos era conservarlos el mayor tiempo posible, ya que cada vez eran más frecuentes los periodos de escasez con inviernos duros y sequías.

Las primeras formas de conservar los alimentos fueron el fuego, el hielo (en las regiones más frías) y el calor del sol, pero con el paso del tiempo se desarrollaron otras técnicas, como la pasteurización, la liofilización (un tipo de deshidratación que utiliza el frío como herramienta) y la adición de conservantes.

Hoy en día, el procesado de alimentos va más allá de la conservación y tiene otros objetivos, como la comodidad y el placer a través del consumo de alimentos.

Beneficios de los alimentos naturales

Los alimentos naturales tienen numerosos beneficios, entre ellos

Rico en nutrientes: Al ser frescos, conservan las vitaminas y minerales que se encuentran de forma natural en su composición. Además, son fuente de antioxidantes y otros nutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo;

Más saludable: De hecho, si son ecológicas, evitan la ingesta de sustancias cancerígenas presentes en los agroquímicos. Además, las legumbres como garbanzos, alubias, soja y guisantes tienen mucha fibra, lo que contribuye a la digestión y al rendimiento intestinal.

Hidratación: Cuando ingerimos alimentos con fibra, sentimos más sed y aumenta nuestro consumo de agua, lo que favorece la hidratación corporal, elimina toxinas e incluso previene los terribles cálculos renales.

Efectos nocivos de los alimentos procesados e industrializados

Los alimentos ultraprocesados pueden ser muy perjudiciales para la salud debido a su elevada concentración de aditivos químicos, grasas, azúcar y sal, entre otros. Algunos compuestos, como las grasas trans, ya se han asociado a un mayor riesgo de infarto de miocardio y accidente cerebrovascular.

Un estudio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) realizado entre 2000 y 2013 en 13 países de América Latina demostró que la venta de productos ultraprocesados aumentó significativamente, al tiempo que también creció el número de pacientes con sobrepeso u obesidad. Del mismo modo, se observa un gran incremento en el peso corporal promedio de los habitantes de la región.

Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que uno de los principales factores para el desarrollo de enfermedades no transmisibles es el elevado consumo de alimentos con pocos nutrientes y alto valor energético, los ultraprocesados.

¿Qué alimentos debo priorizar para llevar una dieta sana?

La Guía Alimentaria para la Población Brasileña trae grandes sugerencias para mantener una dieta sana y equilibrada. Compruébelo:

- Consume muchos alimentos naturales y mínimamente procesados, serán la base de tu dieta. Si puedes, prefiere los orgánicos;

- Los aceites, las grasas, la sal y el azúcar deben consumirse en pequeñas cantidades, sólo para condimentar y aromatizar las preparaciones culinarias;

- Disminuya el consumo de alimentos procesados y utilícelos con moderación en las recetas;

- Evite en la medida de lo posible los alimentos ultraprocesados.

¿Qué alimentos evitar?

La principal recomendación es evitar los alimentos ultraprocesados y reducir la ingesta de alimentos procesados. A menudo dejamos de consumir productos más naturales, como el aceite y el azúcar, para sustituirlos por productos industrializados con nombres e ingredientes que ni siquiera podemos pronunciar correctamente.

Hay que tener cuidado con los alimentos que se venden como "sanos", pero que en realidad están llenos de sustancias químicas perjudiciales para la salud. Si la lista de ingredientes está aparentemente en griego, olvídese de él. Es un producto ultraprocesado disfrazado. Así que el consejo de oro es leer la etiqueta para determinar si el alimento es bueno o no.

Impactos de los alimentos procesados

Según datos de la Guía Alimentaria para la Población Brasileña, los alimentos procesados pueden tener impactos negativos que van más allá de cuestiones vinculadas a la salud y la nutrición. Descúbrelo todo a continuación.

Repercusiones en el mercado alimentario

La fabricación y el consumo exagerado de alimentos procesados han tenido un impacto muy negativo en el mercado alimentario. Esto se debe a que, desde la industrialización, la producción en este sector ha experimentado una gran transformación.

La aparición de nuevas tecnologías de procesado y la creciente falta de tiempo han favorecido la creación de alimentos ultraprocesados, alimentos que llegan prácticamente listos para consumir.

Ante este nuevo escenario, la industria ha cambiado su forma de producir alimentos, y ya no se centra sólo en la conservación y la seguridad alimentaria, sino más bien en la apariencia, el sabor y la practicidad.

Impacto en la cultura

La industria de los alimentos procesados suele influir mucho en la cultura, porque las marcas crean envases y etiquetas muy atractivos que llaman la atención y acaban marcando tendencias.

Las empresas más famosas invierten millones en campañas publicitarias para lanzar productos que teóricamente fomentan la inclusión, la diversidad y el sentimiento de pertenencia a una comunidad moderna y superior.

En este contexto, las culturas alimentarias tradicionales y más sanas son vistas como anticuadas y aburridas, especialmente por los jóvenes.

Repercusiones en la vida social

El impacto social es uno de los mayores provocados por la industria de alimentos procesados, ya que están diseñados para ser consumidos sin necesidad de preparación, en cualquier momento y lugar.

De este modo, transmiten la idea de que la preparación de los alimentos y la convivencia en torno a la mesa durante la comida no son importantes, ya que estos productos suelen consumirse sin hora fija y a menudo la persona come sola en medio de las prisas.

Además, como el reparto de tareas no es una práctica habitual en las familias brasileñas, la propuesta de una comida que no da trabajo funcionó a la perfección.

Repercusiones en el medio ambiente

Los impactos de la industria de alimentos procesados sobre el medio ambiente son enormes. Gran parte de los procesos de producción, distribución y comercialización son perjudiciales para la naturaleza y, en consecuencia, amenazan la sostenibilidad del planeta en su conjunto.

La parte más visible del daño causado por las empresas está en los montones de envases desechados de forma inadecuada, ya que la mayoría no son biodegradables y siguen contaminando el medio ambiente durante miles de años.

Además, hay un gran gasto de agua y energía, por no hablar de la emisión de contaminantes, que es colosal. Así, se produce una gran degradación de la naturaleza, con reducción de la biodiversidad y de las reservas de agua. El grado de compromiso de los recursos naturales es enorme.

Más información sobre alimentos naturales

Los alimentos naturales proceden de la naturaleza, como su nombre indica, y por eso son más sanos. Ofrecen muchos nutrientes, colores vivos y sabores únicos. Conozca a continuación su importancia.

¿Es lo mismo la alimentación natural que la ecológica?

Mucha gente cree que los alimentos naturales y ecológicos son lo mismo, pero hay que saber que estos términos definen productos diferentes. Cada uno tiene sus propias peculiaridades y, por tanto, no pueden considerarse sinónimos.

Los alimentos naturales son todos aquellos que crecen sin intervención humana, manteniendo así todas sus características originales. Sin embargo, si la tierra está contaminada con productos químicos, el producto final puede verse comprometido.

Los alimentos ecológicos, por su parte, están libres de cualquier aditivo químico, agrotóxicos, pesticidas, fertilizantes, abonos artificiales, antibióticos y transgénicos, por lo que no causan ningún daño al consumidor final. Además, se respeta a los animales y al medio ambiente durante el proceso.

Otro punto que merece la pena mencionar es que todo producto ecológico es un alimento natural, pero no todo lo natural es ecológico, ya que para obtener el sello ecológico es necesario obedecer una serie de normas establecidas por los organismos de certificación.

¿Por qué es importante comer alimentos naturales?

Crear hábitos alimentarios que impliquen el consumo de alimentos naturales es sumamente beneficioso para la salud. Compruébelo:

Prevención de enfermedades: ricas en vitaminas, minerales, fibra, proteínas, grasas buenas y otros nutrientes, son capaces de prevenir el envejecimiento prematuro y varias enfermedades. Además, al estar libres de aditivos químicos, no estimulan la acción de los radicales libres;

Longevidad: Una dieta basada en alimentos naturales se considera el secreto de los centenarios. Los estudios demuestran que es la clave de una larga vida porque fortalece el organismo;

Mejora de la calidad de vida: una dieta equilibrada es un ritual de autocuidado, ya que proporciona más energía y estimula la producción de hormonas de la felicidad.

¿Cómo incluir alimentos naturales en su dieta?

Incluso con una rutina ajetreada, es posible incluir alimentos naturales en tu dieta. Echa un vistazo a algunos consejos:

Elige con cuidado: Al hacer la compra, hay que fijarse en el aspecto general de las frutas y hortalizas: deben estar intactas y tener un color vivo, para que no se estropeen tan deprisa;

Planifique la compra: Prefiera los alimentos frescos de temporada, ya que son más frescos y baratos. Para evitar el despilfarro, compre sólo lo que necesite para unos días;

Cuida las verduras: Como son más frágiles, se recomienda prepararlas lo antes posible. Pero si va a conservarlas en el frigorífico, lávelas con agua corriente y déjelas unos minutos en una solución desinfectante. Séquelas bien y guárdelas en bolsitas.

¡Haz que tu dieta sea más sana y verás los beneficios en tu vida!

No siempre es fácil incluir alimentos sanos en la rutina. Una gran dificultad es distinguir los alimentos naturales de los procesados, ya que muchos productos intentan engañarnos con la palabra "sano" en el envase.

Sin embargo, tener una rutina de hábitos saludables aporta muchos beneficios a la salud, que van desde el cuerpo hasta la mente. Los alimentos naturales son muy poderosos, capaces de prevenir enfermedades y ayudar en el tratamiento de dolencias como la hipertensión, la diabetes, la ansiedad e incluso la depresión.

Por lo tanto, merece la pena invertir parte de su tiempo en preparaciones saludables, utilizando sólo ingredientes in natura o mínimamente procesados. Su salud se lo agradecerá.