Pensamientos intrusivos: sexuales, violentos, religiosos, etc.

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Jennifer Sherman

¿Qué son los pensamientos intrusivos?

Los pensamientos intrusivos son, como su nombre indica, intrusos. Son pensamientos que aparecen de repente, sin razón para estar ahí, y todo el mundo está sujeto a ellos. Aparecen con un poco más de fuerza que un pensamiento automático común. Algunas personas pueden apegarse demasiado a estos pensamientos, generando un malestar y sufrimiento, siendo difícil "deshacerse" de ellos.

Normalmente, los pensamientos intrusivos están relacionados con trastornos de ansiedad, pero esto no es determinante para que aparezcan estos pensamientos. En general, están relacionados con un trauma, un miedo o un acontecimiento pasado. En este artículo, aprenderás qué significan los pensamientos intrusivos y cuáles son sus tipos, ¡consúltalos a continuación!

Significado del pensamiento intrusivo

Puede parecer complejo entender sobre el tema de los pensamientos intrusivos, así que para ayudarte a entender más sobre el tema, vamos a enumerar algunas circunstancias en las que se incrusta este tipo de pensamiento ¡Compruébalas a continuación!

Relación con el miedo

Uno de los orígenes de los pensamientos intrusivos, en la mayoría de los casos, está ligado a algún tipo de miedo. Aunque el miedo es algo totalmente natural para todo ser humano, es un sentimiento ligado a nuestro instinto de supervivencia.

Por lo general, el miedo que provocan este tipo de pensamientos es normal, ya que representa una valoración errónea que la persona ha hecho de la situación y da la sensación de que puede ocurrir algo malo.

Cuando sucede

Tener pensamientos intrusivos es más común de lo que se piensa. Pueden surgir durante cualquier tarea diaria que estemos realizando o simplemente durante un momento de descanso y tranquilidad, es decir, no hay tiempo para que ocurran.

Como el cerebro humano es una "máquina" capaz de procesar millones de pensamientos, la mente, mientras procesa los pensamientos automáticos, está en el "fondo" procesando estos pensamientos intrusivos.

Con quién sucede

El pensamiento intrusivo le ocurre a cualquiera, ya que forma parte de la experiencia humana el tenerlo. Sin embargo, este tipo de pensamiento intrusivo es más común en personas que padecen TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo), estrés postraumático, trastorno de ansiedad, depresión y depresión postparto.

El origen de estos pensamientos variará de una persona a otra, ya que nuestro cuerpo reacciona de una manera muy individual y única, y cada persona se siente de manera diferente. Sin embargo, este tipo de pensamiento puede ocurrir a cualquier individuo a cualquier edad.

Pensamientos "buenos" intrusivos

Si entiendes que los pensamientos intrusivos son sólo malos pensamientos, estás muy equivocado. Este tipo de pensamientos pueden surgir como ideas o momentos de reflexión a lo largo de los días. A menudo, son ideas fuera de lugar que aparecen de la nada y acaban perdurando en la mente durante un tiempo.

Generalmente, son pensamientos en los que las temáticas son bastante variadas, pero lo importante es saber que son, sí, capaces de generar sentimientos de alegría y felicidad, provocando un bienestar. Para tener más contacto con los buenos pensamientos intrusivos, es importante estar en ambientes que estimulen esto, ya sea viajando, en reuniones con amigos o simplemente haciendo actividades que te gusten.

Pensamientos "malos" intrusivos

Cuando tu calidad de vida se ve afectada, pronto, tu mente también se verá impactada. Con esto, la aparición de pensamientos intrusivos "malos" se hace más presente. Si los pensamientos intrusivos negativos persisten, siempre es bueno buscar la ayuda de un profesional que te ayude a entenderlos.

A menudo, estos pensamientos pueden estar relacionados con algún miedo o trauma del pasado y, por lo tanto, merecen la atención de un especialista. Por lo tanto, este tipo de pensamiento se vuelve malo cuando se fija y su vida comienza a organizarse a partir de lo que no es cierto

Pensamientos intrusivos y obsesivos

Es posible clasificar como una necesidad humana el querer tener el control de todo y de todos. Sin embargo la vida nos demuestra lo contrario, trayendo aspectos que son incontrolables, como es el caso de algunos pensamientos. Cuando intentamos controlar los pensamientos intrusivos, estamos dando un margen para que se conviertan en pensamientos obsesivos.

Para que los pensamientos intrusivos se consideren obsesivos, deben ser intrusivos, constantes, desagradables e indeseables. Así, los pensamientos obsesivos se diferencian de los intrusivos cuando se hacen más frecuentes y no somos capaces de disociarlos de la vida cotidiana, aportando niveles inusuales de trastorno a la vida y especialmente a la salud mental.

Pensamientos intrusivos y realidad

Quizás, este es uno de los aspectos más importantes a entender: los pensamientos intrusivos y la realidad. El hecho de que tengamos pensamientos intrusivos no significa que la realidad que traen sea cierta, estos, como cualquier otro, son solo pensamientos.

Al comprender que no tenemos un control absoluto sobre lo que pensamos o lo que pasa por nuestra mente, podemos decir que los límites entre el pensamiento y la acción los establecemos nosotros, por lo que debemos preocuparnos menos por el contenido de esos pensamientos.

Ejemplos de pensamientos intrusivos

En nuestra vida cotidiana, estamos rodeados de estímulos externos. Estos estímulos suelen ser capaces de aumentar la presencia de pensamientos intrusivos, ya que éstos surgen a través de nuestra relación con el mundo.

Para ilustrar mejor y ayudar a entender qué son los pensamientos intrusivos, es importante hablar más de algunos de ellos.

Así, pensamientos como "tirarse de un vehículo en marcha", "agredir a un desconocido", "hacer daño voluntariamente a una persona que te gusta", "empujar a alguien por un balcón" son algunos de los ejemplos de pensamientos intrusivos.

Tipos de pensamientos intrusivos

Ahora, para entender mejor los pensamientos intrusivos, es interesante saber cuáles son sus tipos ¡Comprueba a continuación cuáles son y sus principales características!

Sexual

Los pensamientos intrusivos suelen estar relacionados con los pensamientos eróticos, siendo el origen del pensamiento el deseo de tener relaciones con personas o situaciones que a menudo son impensables. El deseo de tener una relación con un miembro de la familia o un compañero de trabajo, o tal vez con una persona muy cercana y amigable, pueden clasificarse como tipos de pensamientos intrusivos sexuales.

Violento

A veces los intrusos acaban siendo los pensamientos que sugieren actos de violencia contra un ser querido, alguien de la familia o un desconocido.

El mero hecho de tener este deseo de actitud violenta puede entenderse como un tipo de pensamiento intrusivo violento. A menudo, este pensamiento surge en momentos de ira y falta de control sobre una determinada situación.

Obsesivos

Los pensamientos intrusivos obsesivos son desagradables, a menudo constantes e insistentes. Una característica muy presente de este tipo es el hecho de que no es deseado cada vez que surge.

Es un tipo de pensamiento en el que el individuo tiende a luchar contra sus propios pensamientos, haciendo todo lo posible por controlarlos y alejarlos, aun sabiendo que esto es prácticamente imposible.

Así que cuanto más desea no tener ese pensamiento, más lo fija en su cabeza, es decir, provoca el efecto contrario.

Autoestima

Vivimos en un mundo en el que la comparación reina con fuerza cuando hablamos de autoestima. El mundo virtual tiende a potenciar los pensamientos intrusivos de autoestima, debido al exceso de contenidos de las comparaciones y al fácil acceso a la vida de los famosos y de los grandes creadores de opinión.

Así, pensamientos como "hoy me veo muy feo", "no me queda bien ninguna ropa", "mi cuerpo no me favorece, estoy demasiado gordo" son algunos ejemplos de los que se relacionan con la autoestima -que es fundamental para todo ser humano-. Se puede afirmar que este tipo de pensamientos pueden estar relacionados con algún tipo de ansiedad, por ejemplo.

Relaciones

Cuando recibimos un abrazo, una caricia o un cumplido de alguien, es común tener esa sensación de que no somos dignos de ese momento. Este es el tipo de pensamiento intrusivo que está relacionado con los aspectos de la relación.

Estos pensamientos, cuando surgen, traen la idea de que no somos dignos del amor que estamos recibiendo, creando una sensación de no merecer, cuando se potencia.

Religión

A veces, en la mente surgen ideas relacionadas con la sensación de que algunos actos realizados son contrarios a la voluntad de Dios. Se trata de un tipo de pensamiento intrusivo que se refiere a la sensación o percepción de estar cometiendo algún tipo de pecado o infracción que, a los ojos divinos, es muy malo y susceptible de ser castigado.

Así que este tipo de pensamiento tiende a juzgar nuestras acciones y nuestros valores en función de lo que está bien o mal, orientado a pensamientos religiosos, algo más moralistas.

Cómo afrontar los pensamientos intrusivos

En los temas que te presentamos a continuación, aprenderás a lidiar con los pensamientos intrusivos de una manera más práctica y efectiva. Estos aspectos te ayudarán en tu relación con tus pensamientos, aportando más calidad a tu salud mental. ¡Compruébalos a continuación!

Son sólo pensamientos

El primer paso que hemos enumerado es extremadamente importante: aceptar que los pensamientos intrusivos son sólo pensamientos y que no son ni te definen te ayuda a distanciarte de lo que es real a lo que tu propia mente está creando.

Lo que estos pensamientos suelen transmitir, cuando son malos, no significa que algo, de hecho, vaya a suceder. Son sólo ideas y, por tanto, no presentan una verdadera realidad, son sólo una idealización de la misma.

Aceptar los pensamientos intrusivos

Aceptar los pensamientos intrusivos es una actitud fundamental para poder afrontarlos mejor. Ya sean pensamientos buenos o malos, muchas personas intentan reprimirlos o expulsarlos, como si fuera algo negativo, pero sin encontrar el resultado que esperaban.

Con esta actitud, se tiende a reforzar los sentimientos ante esta experiencia.

Además, la aceptación no significa que haya que permanecer como rehén de este tipo de pensamiento y no tener ninguna actitud al respecto, sino todo lo contrario, de hecho, esta aceptación debe ir acompañada de la capacidad de darse cuenta de que podemos, cuando queramos, volver a poner nuestra mente en marcha.

Diálogo con los pensamientos intrusivos

Cuando aparece el pensamiento intrusivo, una actitud que te ayudará a superarlo es simplemente dialogar con él. Al hacerlo, ayudas a disminuir el peso del pensamiento, disminuyendo también el sufrimiento que te causa.

Cuando notes que estás inmerso en estos pensamientos, intenta dialogar y nombrarlo con la siguiente frase "noto que tengo un pensamiento". De esta manera, habla del pensamiento que está pasando por tu cabeza. Practicando esto, ayudarás a volver al centro de tu atención, escapando de la marea de pensamientos intrusivos. Vale la pena intentarlo.

Desafiar los pensamientos intrusivos

Desafiar los pensamientos intrusivos, es decir, cuestionarlos, te ayudará a entender mejor de dónde vienen y también a ponerles nombre. A menudo sufrimos mucho con los pensamientos intrusivos negativos al dejar que se fortalezcan en nuestra mente. Cuando intentamos cuestionarlos, estamos haciendo todo lo posible por investigar y quizás entender su origen.

Por eso, si los afrontamos de frente y hacemos algunas buenas reflexiones, podemos estar más en contacto con el tipo de pensamiento y, a menudo, ser capaces de identificar si realmente representan la realidad o son sólo deducciones creadas por nuestra mente.

Por lo tanto, los retos acaban disminuyendo algunos miedos y rompiendo algunos estigmas, lo que nos permite ver esta experiencia de una manera más holística.

¿Son peligrosos los pensamientos intrusivos?

Como hemos entendido, los pensamientos intrusivos son naturales y forman parte de la experiencia humana. Pueden existir como pensamientos malos o buenos, teniendo en cuenta que, en cada persona, esta intensidad puede cambiar.

Por lo tanto, tener pensamientos negativos intrusivos con demasiada frecuencia, que hacen que no puedas asociar lo que es la realidad y lo que es sólo una deducción, puede ser peligroso para la salud de tu mente. Sin embargo, hay formas de tratar los pensamientos intrusivos, y una alternativa es a través del psicoanálisis.

Al tratar de identificar quiénes somos, a través del proceso de autoconocimiento, podemos lidiar mejor con estos pensamientos. Por lo tanto, la ayuda profesional y psicológica es muy bienvenida si se sufre mucho con los pensamientos intrusivos.

Por último, es fundamental que comprendamos que, aunque se trate de pensamientos negativos que a menudo nos producen malas sensaciones y sentimientos, ¡siguen formando parte de cualquier ser humano!

Como experta en el campo de los sueños, la espiritualidad y el esoterismo, me dedico a ayudar a otras personas a encontrar el significado de sus sueños. Los sueños son una herramienta poderosa para comprender nuestra mente subconsciente y pueden ofrecer información valiosa sobre nuestra vida diaria. Mi propio viaje al mundo de los sueños y la espiritualidad comenzó hace más de 20 años, y desde entonces he estudiado mucho en estas áreas. Me apasiona compartir mi conocimiento con otros y ayudarlos a conectarse con su ser espiritual.