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Más información sobre la depresión durante el embarazo
El embarazo debería ser una etapa de felicidad y plenitud, pero el cuerpo de la mujer experimenta importantes cambios hormonales, que provocan disfunciones químicas cerebrales y fisiológicas. Estos cambios pueden afectar a las emociones, provocando ansiedad, tristeza, estrés y depresión, un trastorno del estado de ánimo más frecuente en mujeres que en hombres.
También hay otros factores que pueden desencadenar la enfermedad, como las dificultades económicas, un embarazo no deseado o no planificado, episodios previos de depresión y la falta de apoyo de la familia y la pareja. Algunos estudios revelan que alrededor del 20% de las mujeres sufren depresión durante el embarazo.
Sin embargo, se cree que esta cifra podría ser aún mayor, ya que muchas mujeres no tienen acceso a tratamiento o sienten vergüenza de revelar su enfermedad. En este artículo, veremos más de cerca cómo identificar los signos y síntomas, así como las consecuencias y la forma de tratar la depresión en el embarazo. Siga leyendo.
Características de la depresión en el embarazo
Con tantos cambios hormonales durante el embarazo, es común que aparezcan algunos síntomas que pueden ser señal de depresión. Además, existen algunas causas que pueden desencadenar la enfermedad durante este periodo. En esta sección, consulta las características y los principales grupos de riesgo para desarrollar depresión en el embarazo. Lee a continuación.
¿Qué es la depresión en el embarazo?
La depresión en el embarazo es un trastorno mental caracterizado por ansiedad, tristeza, melancolía y cambios de humor, que puede afectar a la formación del bebé debido a la falta de motivación de la mujer para cuidar de sí misma y, en consecuencia, de su hijo. Este trastorno puede desencadenarse por cambios hormonales.
Sin embargo, hay otras razones asociadas a la aparición de la enfermedad, como el miedo a ser madre, sobre todo en la adolescencia y por primera vez. Las cuestiones socioeconómicas y los antecedentes de depresión previa también pueden ser causas.
Durante los cuidados prenatales, el ginecólogo/obstetra puede observar determinados síntomas y remitirla al tratamiento más adecuado. Generalmente, se indica psicoterapia y, si es necesario, el psiquiatra asociará el tratamiento al uso de antidepresivos.
Signos y síntomas de la depresión en el embarazo
Durante el embarazo, es habitual que se produzcan cambios hormonales que den lugar a repentinos cambios de humor. Sin embargo, si una mujer experimenta algunos síntomas recurrentes, es necesario buscar ayuda médica:
- Ansiedad;
- Melancolía y tristeza constante;
- Falta de motivación para realizar actividades;
- Irritabilidad;
- Falta de cuidados personales (bañarse y comer bien, por ejemplo)
- Problemas relacionados con el sueño, insomnio o somnolencia frecuente;
- Pérdida o exceso de apetito;
- Pensamientos o intentos suicidas;
- Dificultad para concentrarse;
- Estrés;
- Aislamiento.
Es importante tener en cuenta que estos signos pueden variar de una persona a otra, por lo que es importante vigilar la frecuencia e intensidad de los síntomas.
¿Por qué es difícil detectar los síntomas de la depresión durante el embarazo?
La depresión suele ser difícil de diagnosticar porque algunos de los signos son similares a los del embarazo, como los cambios en el sueño, el apetito, el estado de ánimo y la disposición, por lo que los síntomas se confunden, llevando a la mujer o al médico a creer que son síntomas normales del embarazo y, por tanto, no se les da la importancia debida.
Además, las mujeres pueden sentir vergüenza o miedo debido al estigma que conllevan los trastornos mentales. Otra razón que dificulta el tratamiento de la depresión es que sólo se cuida la salud física, en detrimento de la emocional.
El uso de antidepresivos en el embarazo puede ser una de las razones por las que la enfermedad no se identifica ni se trata adecuadamente, debido al temor a los posibles riesgos y efectos secundarios sobre el desarrollo del bebé.
Posibles causas de la depresión en el embarazo
Hay varias causas que pueden llevar a una mujer a desarrollar depresión gestacional, y en muchos casos están relacionadas con cuestiones externas, por ejemplo:
- Falta de apoyo emocional, ya sea de la familia o de la pareja;
- Dificultades económicas (desempleo o falta de apoyo económico del padre del bebé);
- Malas condiciones de vivienda;
- Relación abusiva, en la que hay agresión física, sexual y verbal.
- Cambios hormonales;
- Diagnóstico de depresión u otro trastorno emocional antes del embarazo;
- Embarazo no deseado;
- Ser madre soltera;
- Embarazo de alto riesgo en el que se ha producido previamente un aborto espontáneo o la pérdida del bebé.
Principales grupos de riesgo de desarrollar depresión gestacional
Algunos grupos de mujeres son más propensos a desarrollar depresión durante el embarazo, como los antecedentes familiares de la enfermedad, y existe una fuerte tendencia a que las mujeres desarrollen esta afección en algún momento de su vida. Las adolescentes también pueden sufrir depresión debido a la falta de madurez emocional y de apoyo tanto de la familia como del padre del bebé.
Quedarse embarazada es un proceso doloroso y estresante para algunas mujeres, sobre todo para las que lo han intentado varias veces. Cuando por fin se quedan embarazadas, existe un gran temor a perder el bebé, lo que provoca una serie de cambios químicos en el organismo.
Consecuencias de la depresión en el embarazo
El embarazo es una etapa muy delicada y requiere muchos cuidados. Cuando la depresión no se diagnostica o se trata incorrectamente, puede tener graves consecuencias.
La madre y el bebé son los que más sufren los efectos de la enfermedad, pero la familia también puede verse afectada emocionalmente. He aquí un repaso a los posibles daños que puede causar la depresión gestacional.
Para el bebé
Si la depresión no se diagnostica y trata durante el embarazo, el bebé puede sufrir algunas consecuencias, como nacer prematuro, afectar al desarrollo físico y cerebral y nacer con bajo peso.
Algunos estudios han demostrado que los bebés cuyas madres sufren depresión tienen más probabilidades de ser hiperactivos, irritables y llorar con facilidad, en comparación con las madres no deprimidas.
Para mamá
Dependiendo del grado de depresión, los efectos de la enfermedad pueden ser perjudiciales para la madre. La pérdida de interés por cuidar de sí misma aumenta las posibilidades de desarrollar enfermedades graves debido a la malnutrición o al consumo de alimentos en mal estado.
Además, las mujeres son más propensas a desarrollar adicciones a drogas lícitas e ilícitas y, en los casos más graves, pueden atentar contra su propia vida.
Para la familia
La depresión durante el embarazo no sólo afecta a la madre y al bebé, sino que también tiene consecuencias para la familia, porque entender y afrontar la enfermedad puede afectar a las emociones de todos los que forman parte de este momento tan importante. Por eso, la depresión gestacional provoca un sentimiento de impotencia y culpabilidad, porque no saben cómo ayudar a la mujer.
Cómo se evalúa, diagnostica y trata la depresión en el embarazo
Para diagnosticar y tratar la depresión es necesario seguir una serie de pasos. Además, la enfermedad puede manifestarse en diferentes grados, por lo que hay que valorar el mejor tratamiento según cada caso. A continuación te explicamos cómo se evalúa, diagnostica y trata a las mujeres deprimidas. Sigue leyendo.
Evaluación
Para identificar los signos y síntomas de la depresión en el embarazo, se hacen varias preguntas sobre la vida y las emociones de la mujer. Por lo general, el obstetra puede reconocer los cambios emocionales de la embarazada y remitirla a atención psicológica o psiquiátrica.
Sin embargo, sólo un médico especializado en salud mental puede diagnosticar la depresión y recomendar el mejor tratamiento, dependiendo del grado de la enfermedad. Por eso es esencial la atención prenatal, no sólo para la salud física, sino también para ayudar a cuidar la salud mental de la mujer.
¿Cuándo buscar ayuda?
Algunos síntomas del embarazo, sobre todo en el primer trimestre y los tres últimos meses, pueden caracterizarse por cambios hormonales o factores externos que comprometen la salud mental de la mujer.
Por lo tanto, cuando los signos más comunes, como dormir mucho o poco, falta de concentración y cambios de humor, son persistentes, pueden ser un signo de depresión, por lo que la madre o la familia deben buscar ayuda e iniciar el tratamiento lo antes posible, especialmente las mujeres que tienen antecedentes de crisis depresivas.
Diagnóstico
Diagnosticar la depresión no es tan sencillo, porque algunos de los síntomas pueden confundirse con síntomas comunes del embarazo y, por desgracia, la enfermedad está estigmatizada, de modo que las mujeres no exponen sus emociones y aflicciones por miedo o vergüenza.
Sin embargo, cuando una mujer presenta más de cinco signos, se puede establecer un diagnóstico y, en función de la intensidad de la enfermedad, se puede indicar el tratamiento más adecuado.
Tratamientos para la depresión durante el embarazo
Tras el diagnóstico de depresión en el embarazo, hay una serie de tratamientos que pueden ser eficaces para ayudar a la mujer a recuperarse. Sin embargo, no todos los métodos son adecuados o deben utilizarse, ya que dependiendo de la etapa del embarazo, no se recomienda el uso de antidepresivos, por ejemplo.
Psicoterapia
Inicialmente, la psicoterapia tiene la función de ayudar a la mujer a tener más confianza en sí misma, a exponer sus angustias y aflicciones, a reconocer su valor y a sentir que no está sola en un momento tan delicado como el embarazo. Así, este tratamiento está indicado cuando la depresión es de grado leve, es decir, entre 5 y 6 síntomas identificados.
Medicamentos
En los casos más graves de depresión en el embarazo, cuando la mujer presenta entre 7 y 10 síntomas, el psiquiatra puede recomendar el uso de antidepresivos. Sin embargo, no se recomienda su uso en el primer trimestre del embarazo, porque hay más posibilidades de aborto, malformación o retraso en el desarrollo del feto.
Además, el uso de plantas medicinales para tratar la depresión, como la hierba de San Juan, está contraindicado durante este periodo. Para minimizar los riesgos, el médico suele recetar inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, que se consideran seguros.
Tratamientos complementarios
Además de los tratamientos convencionales, existen otros procedimientos complementarios que pueden ayudar a las mujeres a superar la depresión gestacional. La acupuntura es un método ancestral que utiliza agujas en puntos específicos del cuerpo para aliviar tensiones y aportar bienestar.
El ejercicio físico también es excelente para liberar hormonas como las endorfinas, que proporcionan una sensación de placer y felicidad. Sin embargo, la actividad debe ser ligera, basta con caminar entre 10 y 20 minutos al día.
Tener un hobby es una forma terapéutica de estimular la mente, con una actividad placentera que genera satisfacción personal. Por eso, además de los métodos tradicionales, es importante introducir otras posibilidades curativas para que las mamás puedan superar la depresión de forma rápida y saludable.
Más información sobre la depresión durante el embarazo
La depresión es una enfermedad mental que plantea muchas dudas, sobre todo durante el embarazo, cuando a menudo se pasa por alto. Al fin y al cabo, este periodo es extremadamente delicado y requiere muchos cuidados para la salud física de la madre, para que el bebé nazca a tiempo y sano.
Sin embargo, existen algunos factores importantes que ayudan a tratar este trastorno emocional. Este tema tratará sobre cómo superar o prevenir la depresión gestacional, así como otra información relevante. Compruébelo a continuación.
Cómo superar la depresión en el embarazo
En cuanto se diagnostica la depresión gestacional, es posible superar la enfermedad si se realiza un seguimiento serio con la ayuda de un psiquiatra y un psicólogo. El apoyo de la familia, los amigos y la pareja marca la diferencia en el proceso de curación.
Además, el descanso y dormir bien son esenciales para la salud mental y emocional, por lo que con el tratamiento adecuado y el cariño de los seres queridos se puede superar la depresión, evitando posibles daños a la madre, especialmente al bebé.
Cómo ayudar a alguien que sufre depresión durante el embarazo
La comprensión de los familiares y compañeros es fundamental para ayudar a alguien con depresión gestacional, por lo que no hay que menospreciar ni invalidar los sentimientos de la mujer cuando expone sus emociones. El ambiente debe ser armonioso, con el menor roce posible, para no causar estrés y malestar.
También es muy importante acompañar a la embarazada a las citas médicas y participar en grupos de apoyo y asesoramiento, pues son formas de ayudar a alguien que está pasando por un momento tan difícil.
Cómo prevenir la depresión durante el embarazo
Para prevenir la depresión durante el embarazo, es muy importante cuidar la salud mental, independientemente de si se tienen síntomas o no. Además, contar con una red de apoyo es esencial para proporcionar una sensación de seguridad durante y después del embarazo. La actividad física estimula la producción de endorfinas, la hormona responsable de la sensación de placer.
Mantener unos buenos hábitos también es una forma de prevenir este trastorno mental, por lo que llevar una dieta sana, dormir bien y reducir las adicciones al alcohol y al tabaco ayudarán a prevenir el desarrollo de la enfermedad.
¿Se acaba la depresión después de dar a luz?
Una vez que la mujer ha dado a luz, la depresión no suele terminar. Es muy frecuente que las mujeres manifiesten tristeza y otros síntomas de la enfermedad en los primeros 15 días después del parto. Esto puede deberse a la repentina bajada de hormonas tras el parto. En algunos casos, se produce una mejora significativa después de este periodo, sin necesidad de tratamiento.
Sin embargo, la enfermedad puede manifestarse días o incluso meses después del parto y tiende a ser aún más grave e intensa si no se trata correctamente, por lo que tanto las madres como los familiares deben estar atentos a los signos y uno de ellos es la falta de interés o la incapacidad para cuidar al bebé.
¿Cuál es la diferencia entre la depresión durante el embarazo y la depresión posparto?
En principio, no hay diferencias significativas entre la depresión en el embarazo y el puerperio, porque los síntomas son similares y pueden ser temporales o no. Si la mujer ya ha padecido la enfermedad en otro momento de su vida o si no se trató adecuadamente durante el embarazo, es probable que se manifieste después del parto.
Pero lo que puede diferenciarla es que la depresión en el embarazo tiende a ser más intensa y duradera que tras el parto. En el puerperio, casi el 80% de las mujeres presentan síntomas leves de depresión, en los que no hay necesidad de tratamiento farmacológico y mejoran tras este periodo.
Tenga en cuenta los síntomas de la depresión durante el embarazo y acuda al médico si es necesario.
Los síntomas de la depresión pueden pasarse por alto, ya que son similares a los del embarazo. Sin embargo, cuando estos signos son persistentes, hay que estar alerta y buscar ayuda de un especialista, porque cuanto antes se diagnostique y trate la enfermedad, mayores serán las posibilidades de curación.
El apoyo de la familia y los amigos también es esencial para superar la enfermedad lo antes posible. Afrontar una enfermedad mental no es tan sencillo y se necesita una red de apoyo para que la mujer se sienta protegida y respaldada. Al fin y al cabo, con la llegada del bebé, la madre necesita estar bien física y mentalmente.
Por desgracia, la depresión sigue siendo un tema tabú y es necesario desmitificarla para que más mujeres puedan recibir la ayuda adecuada en un momento tan especial. Así que esperamos que este artículo haya despejado tus dudas y te haya ayudado a reconocer los signos de la depresión en el embarazo.