¿Qué es la hipersomnia? ¡Síntomas, tipos, tratamientos, causas y más!

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Jennifer Sherman

¿Qué es la hipersomnia?

La hipersomnia es un trastorno del sueño muy poco frecuente, por lo que muchas personas pueden padecerlo sin ni siquiera saberlo. En general, uno de los síntomas más aparentes que pueden indicar que existe un problema a resolver es la excesiva somnolencia durante el día.

Cabe destacar que este sueño constante puede ocurrir incluso si la persona afectada por la hipersomnia ha tenido una noche completa de sueño, sin intercurrencias ni otros problemas. Otras consecuencias de la hipersomnia son el cansancio extremo, la falta de energía y la escasa concentración, lo que también puede desencadenar una mayor facilidad para irritarse incluso con situaciones cotidianas. Sigue leyendo.¡siguiendo más detalles y entendiendo!

Tipos de hipersomnia

Existen algunos tipos de hipersomnia que pueden simplificar las acciones y consecuencias de este trastorno. Se diferencian no sólo en los efectos, sino también en las causas y razones por las que el paciente comenzó a presentar este tipo de comportamiento causado por la hipersomnia.

Hay varios factores y pueden ser entendidos como genéticos o provenientes de otros problemas de salud que necesitan ser identificados, examinados y evaluados para entender cuál es el mejor tratamiento y cuidado que se debe tener. Vea cuáles son los tipos de hipersomnia a continuación!

Sueño prolongado idiopático primario

La hipersomnia llamada idiopática o también primaria, no tiene todas sus causas resueltas y comprendidas por la ciencia en este momento, a pesar de los esfuerzos por entender realmente todo lo que engloba este trastorno.

Pero los estudios señalan que este tipo de hipersomnia puede estar vinculada a alteraciones en las sustancias químicas que componen el cerebro y que tienen una relación directa con las funciones del sueño. En este caso, se identifica el sueño prologado como aquel que provoca consecuencias como que el sueño dure más de 24 horas seguidas.

Idiopática primaria sin sueño prolongado

La hipersomnia primaria idiopática, pero que no tiene un sueño prolongado, actúa de forma similar al otro tipo, ya que también se produce por problemas con las sustancias químicas del cerebro que actúan en relación a las funciones del sueño, pero en este caso al no ser prolongado, lo que caracteriza a este tipo es el hecho de que el individuo tendrá una media de 10 horas de sueño.

Sin embargo, otro detalle importante a tener en cuenta para esta identificación es que esta persona necesitará hacer algunas siestas durante el día para sentirse realmente cansada, y aun así puede seguir sintiéndose muy cansada.

Hipersomnia secundaria

La hipersomnia secundaria actúa de forma diferente, ya que en este caso puede estar causada por otras enfermedades, por lo que estos trastornos y enfermedades que provocan un sueño excesivo están presentes en la mayor parte del día de los pacientes afectados.

Algunas de las enfermedades que pueden provocar este tipo de alteraciones son: la apnea del sueño, el hipotiroidismo, la enfermedad de Parkinson, la depresión y la deficiencia de hierro. En el caso de las personas que toman medicamentos, como los ansiolíticos, es habitual que también acaben viéndose afectadas por la hipersomnia, ya que es un efecto secundario esperado de este tipo de medicación.

Síntomas de hipersomnia

Los síntomas de la hipersomnia aparecen de forma muy clara, sin embargo, como traen consigo un cansancio y una somnolencia extremos, muchas personas pueden acabar confundidas y creyendo que sólo son los efectos de una rutina alterada de mucho trabajo y varias tareas que realizar.

Pero algunas señales pueden ayudarnos a entender cuál es realmente el trastorno, para poder tratarlo de forma correcta con el seguimiento de un profesional que haga este diagnóstico. A continuación, ¡vea algunos de los síntomas!

Letargo

Esta es una clara consecuencia de la enfermedad y se manifiesta en el debilitamiento de las constantes vitales, la respiración y los latidos del corazón, que se manifiestan de forma diferente a la normal.

También hay una sensación de cansancio constante, incluso después de haber dormido unas horas. Así, el paciente afectado por la hipersomnia acaba sintiendo siempre la necesidad de acostarse o sentarse porque le falta incluso el control de los músculos, que están más relajados de lo normal.

Ansiedad

Las alteraciones que afectan al sueño en general, también pueden provocar ansiedad en los pacientes afectados, porque hay una falta de control de su propio cuerpo y aunque la persona no quiera racionalmente dormir, inevitablemente tendrá que ceder, porque el cansancio extremo hará que necesite hacer algunas siestas durante el día para mantenerse bien.

Toda la inquietud provocada por el trastorno hace que el paciente se vuelva cada vez más ansioso y esto puede convertirse en un bucle.

Irritabilidad

Cualquier tipo de problema relacionado con el sueño, ya sea por exceso o por defecto, como también se advierte en los pacientes con insomnio, acaba generando cierta irritabilidad en la persona, lo que, una vez más, se debe a la falta de control del cuerpo e incluso a no poder elegir mantenerse realmente despierto, ya que el cansancio lo hace inviable.

Así, uno de los síntomas fáciles de notar en los pacientes que padecen hipersomnia es esta mayor irritabilidad con todo lo que sucede a su alrededor.

Falta de concentración

Para tener concentración para realizar sus actividades diarias, se recomienda que todas las personas tengan un buen sueño nocturno, que en este caso, aunque el paciente lo haya tenido, no será suficiente para aplacar el exceso de sueño y el cansancio que presenta la hipersomnia.

Por lo tanto, la concentración de los pacientes afectados por este trastorno se ve comprometida, ya que a lo largo del día es posible que se sientan muy somnolientos, y esto les dificulta la realización de sus actividades rutinarias, incluso las más sencillas.

Dificultad para despertarse

Los pacientes que padecen hipersomnia, por mucho que lo deseen, no pueden despertarse fácilmente, ya que incluso después de largas horas de sueño siguen sintiéndose cansados y necesitan dormir más tiempo.

Como en el caso de la hipersomnia de sueño prolongado, en la que el paciente puede dormir más de 24 horas seguidas y, sin embargo, se despierta y le resulta muy difícil seguir con su día sin sentir la necesidad de volver a acostarse para echar una siesta o dormir unas horas más.

Exceso de sueño durante el día

La mayor dificultad de la hipersomnia es lidiar con esta cuestión del sueño a lo largo del día, porque los afectados no pueden deshacerse de la necesidad de dormir para aplacar al menos un poco este exceso de sueño que sienten en varios momentos de su rutina.

Por ello, es de gran importancia identificar este trastorno para poder evaluarlo y tomar las medidas necesarias, ya que para muchas personas no existe la posibilidad de realizar las necesarias siestas que la enfermedad pone en su vida diaria.

Dormir más de 8 horas al día y seguir teniendo sueño

A lo largo del día, aunque las personas afectadas por el trastorno de hipersomnia hayan dormido al menos 8 horas, lo que es habitual para la mayoría de la gente, acaban sintiendo mucho sueño. Como se muestra a través de los tipos de hipersomnia, los pacientes que sufren el de efecto prolongado duermen durante 24 horas o más y no se sienten satisfechos.

Y en el no prolongado pueden dormir hasta 10 horas y aun así sentirse muy somnoliento durante el día. De esta manera, este cansancio y somnolencia extrema durante el día no tiene que ver con la cantidad de tiempo, sino con el trastorno, que debe ser identificado. Al notar este tipo de situación, es importante buscar un médico.

Cómo se diagnostica la hipersomnia

La hipersomnia puede ser percibida por los pacientes de una manera muy fácil, ya que largos periodos frente a la sensación de extrema somnolencia muestra claramente que algo está mal.

Por eso, al notar este tipo de situación, es importante que las personas busquen un profesional calificado, para que se haga un diagnóstico y se prescriban medicamentos, o incluso prácticas que ayuden a controlar este sueño extremo, para que los pacientes tengan una mejor calidad de vida para realizar sus tareas diarias. Vea a continuación cómo se hace el diagnóstico!

Especialista en neurología

Al sentir cualquier tipo de descontrol en relación con el sueño, el paciente debe buscar un profesional que sea capaz de evaluar y entender lo que está ocurriendo y si, efectivamente, la persona tiene hipersomnia y de qué tipo es.

El profesional capacitado para entenderlo de forma más amplia y clara es el neurólogo, y es con este especialista con el que se iniciará el diagnóstico del paciente potencialmente afectado por la hipersomnia. Los neurólogos tienen especializaciones para entender claramente los trastornos del sueño y son capaces de evaluar lo que se puede hacer para garantizar una mejor salud de sus pacientes.

Análisis de sangre

A continuación, el especialista pedirá al paciente que se someta a algunas pruebas específicas, que tienen como objetivo evaluar la salud del paciente para descartar otras enfermedades, que podrían ser los agentes causantes del hipersomnio del paciente.

Por ello, las exploraciones van encaminadas a detectar esta causa, ya que existe un tipo de hipersomnia, como se ha mencionado, que puede estar causada por otras alteraciones, incluso hormonales, como el hipotiroidismo y también la anemia, que pueden ser tratadas.

Polisomnografía

Otra prueba que también puede solicitar el neurólogo es la polisomnografía, que es una prueba no invasiva cuyo objetivo es evaluar la actividad respiratoria del paciente, así como la actividad muscular y cerebral.

A través de este tipo de exámenes es posible detectar patrones o comportamientos extraños durante el sueño, por lo que el médico responsable puede evaluar si el paciente está realmente ante una hipersomnia o cualquier otro trastorno del sueño, por lo que los exámenes son muy complementarios porque muestran varias áreas para tener un diagnóstico completo.

Cuestionario de comportamiento

Uno de los principales puntos de partida para que el médico comprenda lo que realmente le ocurre al paciente es el cuestionario de comportamiento, a partir del cual es posible hacerse una idea de qué otras pruebas y evaluaciones pueden realizarse.

En este caso, el médico preguntará al paciente sobre sus comportamientos relacionados con sus momentos de sueño y cómo se siente también durante el día, en relación con la somnolencia y otros aspectos. Una táctica utilizada para ello es la escala de somnolencia de Epworth, que ayuda a determinar estas cuestiones.

Otras pruebas

El médico puede ordenar otras pruebas para verificar lo que el paciente ha estado sintiendo en relación con el trastorno. En este caso, también se puede realizar una prueba de latencia múltiple del sueño.

Esto se hará para evaluar y monitorizar todo el tiempo de sueño del paciente, para que el médico pueda seguir su actividad cerebral durante este periodo. Así, se evalúan varios aspectos, como los movimientos de los ojos y las piernas, los niveles de oxígeno y también las funciones respiratorias.

Tratamiento del hipersomnio

Después de que el médico realice un diagnóstico completo y verifique que, efectivamente, el paciente sufre de hipersomnia, independientemente del tipo, se pueden realizar algunos tratamientos para garantizar una mejor calidad de vida, ya que, en general, estas personas sufren mucho de somnolencia excesiva que puede perjudicar sus estudios, su trabajo y varias otras áreas de la vida.

Los tratamientos se pueden hacer con medicamentos y también conductuales, pero vale la pena señalar, que todos estos procedimientos necesitan ser acompañados por un neurólogo. Lea más abajo!

El tratamiento debe ser seguido por el profesional que realizó el diagnóstico, en este caso el neurólogo, por lo que tendrá plenas condiciones de orientar al paciente sobre la mejor manera de enfrentar el trastorno, con el uso de medicamentos u otras prácticas que puedan ser utilizadas para controlar el exceso de sueño.

Es necesario tener este cuidado, porque como hay más de un tipo de hipersomnia, cada uno debe ser tomado en consideración, porque de acuerdo a esto se pueden definir los tratamientos.

Tratamiento de drogas

En el caso de los pacientes a los que se les diagnostica hipersomnia idiopática o primaria, es habitual que los médicos aconsejen a sus pacientes el uso de medicamentos estimulantes.

Así, podrán cambiar la medicación si es necesario porque no está actuando como se esperaba, alterar las dosis y otros puntos a tener en cuenta que sólo el médico tendrá los conocimientos necesarios para hacerlo.

Tratamiento conductual

En otros casos, es posible que el neurólogo intente encontrar otras formas de controlar la hipersomnia de sus pacientes. Así, existen tratamientos conductuales, que se utilizan en casos de hipersomnia secundaria.

También se pueden utilizar medicamentos en asociación, pero en general, el médico propondrá algunos cambios en la rutina del paciente, como siestas programadas y adaptación de sus horarios para evitar que acabe realizando rutinas no acordes con sus condiciones y capacidades.

¿Debo preocuparme por el hipersomnio en el trabajo?

Es importante que cuando notes los síntomas descritos de forma constante en tu vida, busques la ayuda de un profesional, porque, de hecho, el hipersomnio es algo preocupante en relación con actividades diarias importantes, como el trabajo y los estudios.

Puede dificultar la productividad, ya que el paciente tiende a estar más desatento y no puede tener la concentración necesaria para realizar sus actividades, porque se siente muy somnoliento todo el tiempo.

Por ello, merece la pena preocuparse por estos temas, ya que el hipersomnio puede dificultar enormemente el desarrollo de su trabajo si no se trata de forma adecuada con un seguimiento médico.

Como experta en el campo de los sueños, la espiritualidad y el esoterismo, me dedico a ayudar a otras personas a encontrar el significado de sus sueños. Los sueños son una herramienta poderosa para comprender nuestra mente subconsciente y pueden ofrecer información valiosa sobre nuestra vida diaria. Mi propio viaje al mundo de los sueños y la espiritualidad comenzó hace más de 20 años, y desde entonces he estudiado mucho en estas áreas. Me apasiona compartir mi conocimiento con otros y ayudarlos a conectarse con su ser espiritual.