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¡Conoce todo sobre el Dios Shiva!
En el hinduismo, tradición religiosa originaria del continente indio, Shiva es el Dios superior, conocido como el que aporta la energía vital. Es benéfico y tiene la capacidad de destruir para aportar algo nuevo. Las fuerzas de destrucción y regeneración son sus principales características. .
Según la literatura hindú, el dios Shiva forma parte de una Trinidad compuesta por Brahma, Vishu y Shiva. En equivalencia con la literatura cristiana (catolicismo), la Trinidad hindú se refiere a estos tres dioses como el "Padre", el "Hijo" y el "Espíritu Santo", los seres supremos que dirigen la vida y que deben ser respetados por sus conocimientos y poderes.
El Dios Shiva también es reconocido como el fundador del yoga por su capacidad de generar cambios físicos, mentales y emocionales. Conoce a este Dios hindú, su origen, historia y principales características ¡Sigue leyendo y aprende más!
Conociendo al Dios Shiva
En la India, y en varios otros países, se sigue creyendo que el Dios Shiva tiene poderes de destrucción y regeneración y que éstos se utilizan para acabar con las ensoñaciones y deficiencias del mundo, con lo que se abrirían los caminos para cambios favorables y propicios.
En los valores del hinduismo, la acción del Dios Shiva en la destrucción y la regeneración no es casual, sino que está dirigida y es constructiva. Por ello, en muchas literaturas se le comenta como el Dios del bien y del mal, combinando estas fuerzas contradictorias. Comprenda más sobre el Dios Shiva y sus enseñanzas ¡Compruébelo!
Fuente
La figura de Shiva aparece ya, según las tradiciones religiosas indias, en el momento de la creación del universo. También está presente en el desarrollo de la humanidad y de todo lo que la rodea, como generador de todo lo que conforma el planeta, así como gran sembrador oculto entre bastidores pero que ayuda al conjunto.
El Dios Shiva también aparece al final de todo, como el poder de la destrucción, pero también de la renovación y la transformación. La literatura hindú cree que el universo tiene fuerzas de regeneración, que se producen en ciclos constantes, cada 2.160 millones de años. El poder de la destrucción es del Dios Shiva, que también es el facilitador de la creación de la siguiente esencia del universo, recomponiéndolo.
Historia
Según la historia contenida en las antiguas escrituras de las tradiciones religiosas de la India, el Dios Shiva tenía la costumbre de bajar a la tierra en su forma humana. Normalmente aparecía en el cuerpo de un sabio practicante de yoga, por lo que, hasta hoy, sirve de gran ejemplo a todos los que practican el arte de la meditación.
Aunque el propósito de su presencia en la Tierra era comprender a la humanidad y liberarse de los placeres e indulgencias de la carne humana, Shiva acabó molestando al rey de los demonios, que envió una serpiente para matarlo. Domó a la serpiente, transformándola en su leal escudero y empezó a usarla como adorno alrededor de su cuello. Surgieron nuevos ataques contra Shiva, y todos fueron superados.
Los relatos de la veneración de este Dios y de todas sus acciones se remontan al 4.000 a.C., época en la que también se le denominaba Pashupati.
Este nombre es una combinación de "Pashu", que significa animales y bestias, y "Pati", que significa maestro o señor. Sus habilidades incluyen la capacidad de interactuar con diversas bestias, tanto externa como internamente, y de trascender su propia existencia.
Características visuales
La imagen más extendida del dios Shiva es la representación de un hombre con cuatro brazos, sentado con las piernas cruzadas, con los dos brazos principales sobre las piernas.
En la mano derecha, abierta hacia arriba, por ejemplo, está la representación de la bendición y en la izquierda la presencia de un tridente.
¿Qué aspecto tiene Shiva?
En forma humana, algunas representaciones del Dios Shiva aparecen con la imagen de un hombre. En los libros y representaciones en color, su cara y su cuerpo están siempre pintados en color azul. Tiene piernas largas y brazos bien formados. El tórax está desnudo y también bien delineado. En todas las artes, siempre se le representa con evidencia de los músculos, tanto de la parte inferior como de la superior.
El ojo de Shiva
El Dios Shiva también se representa con un tercer ojo dibujado en la frente, en medio de los dos ojos ya existentes en todo ser humano. Según la leyenda mitológica, el tercer ojo de Shiva simboliza la configuración de la inteligencia y la lucidez. A través de este ojo, Shiva sería capaz de liberar una energía incontrolable, provocando la destrucción de todo.
¿Qué representa el Dios Shiva?
Incluso con su rostro destructivo, Shiva suele ser representado como una persona tranquila, pacífica y sonriente. En algunos casos, también aparece como mitad hombre y mitad mujer, en el mismo cuerpo. Sus representaciones traen a colación la búsqueda de la felicidad completa y perfecta.
Incluso con un lado oscuro y orientado a dirigir a los espíritus malignos, el Dios Shiva representa una pasión indomable, que puede representar la bondad, la protección y un ser benévolo. Pero también se le relaciona con el tiempo, por sus acciones destructivas y transformadoras de todo lo que le rodea.
Shiva y el yoga
En las creencias y valores del yoga, se cree que el Dios Shiva ha sido el precursor de la meditación y de las enseñanzas relacionadas con este arte, ya que vino a la Tierra para intentar liberar su alma de las limitaciones, posiblemente generadas por el cuerpo o incluso por la convivencia con otros humanos. Así, las técnicas empleadas por Shiva se siguen utilizando en el yoga actual y se transmiten de generación en generacióngeneración.
Relación con el Dios Shiva
Shiva se relaciona con otros dioses y personajes de la historia religiosa de la India. Como resultado de estas interacciones, nacieron enseñanzas o hitos en la historia de la India que, hoy en día, son respetados y utilizados como conocimiento pleno de la existencia humana. Comprenda mejor la relación de Shiva con otras figuras hindúes y conozca más sobre este Dios ¡Siga leyendo!
Shiva y la Trinidad Divina hindú
La Trinidad hindú está compuesta por las tres figuras principales del hinduismo, los dioses Brahma, Vishnu y Shiva. Estos dioses simbolizan la generación de la humanidad y toda la existencia, la conservación y el desarrollo, y también la destrucción y la transformación, respectivamente en este orden.
Por lo tanto, comprender la Trinidad es reconocer que cada uno de ellos desempeña un papel marcado y tiene poderes específicos en el mundo.
El Dios Brahma es el primero y creador de todo el universo, mientras que Vishnu es el Dios que mantiene y hace la preservación. El Dios Shiva es el que tiene las fuerzas y poderes para destruir pero también para rehacer el universo, como una nueva oportunidad o un nuevo intento. De esta manera, la trinidad representa los poderes complementarios entre estos tres dioses.
Dios Shiva y Parvati
Se cree que el Dios Shiva estaba casado con Parvati, que en algunas escrituras también aparece bajo el nombre de Kali o Durga. Parvati era la hija reencarnada del Dios Daksha, que no aprobó su matrimonio con Shiva. En sus celebraciones, el Dios Daksha realizó una ceremonia con sacrificios y ofrendas a todos los dioses menos al Dios Shiva.
Según la leyenda, Shiva se enfureció por la desaprobación de Daksha y, durante la ceremonia, Parvati asumió los dolores de su marido y se arrojó al fuego como sacrificio. Shiva, angustiado, reaccionó creando inmediatamente dos demonios para poner fin a la ceremonia.
Los demonios le arrancaron la cabeza a Daksha, pero a instancias de los otros dioses presentes, Shiva volvió a la vida y devolvió a Daksha a la vida, pero Shiva transformó la cabeza de Daksha en una cabeza de carnero y pasó a existir como mitad hombre y mitad bestia. Parvati también volvió a la vida reencarnándose en Shiva.
Dios Shiva, Khartikeya y Ganesha
De la unión de Shiva y Parvati nacieron dos hijos, el dios Ganesha y el dios Kartikeya. Según la historia, Ganesha se generó a partir de la tierra y la arcilla con la responsabilidad de hacer compañía a su madre y protegerla en ausencia de Shiva mientras éste se encontraba en sus prácticas de meditación.
Cuenta la leyenda que un día, al volver de sus peregrinaciones, Shiva no reconoció al niño que estaba en la puerta de la habitación de su madre, por lo que convocó a sus demonios, que arrancaron la cabeza de Ganesha, matándolo.
La madre, al conocer el hecho, acudió a la reunión gritando que efectivamente era el hijo de ambos. Shiva, ante el error, mandó a buscar una cabeza para recomponer a su hijo, pero la más cercana era de elefante. Así, hasta hoy Ganesha aparece con la cabeza de un elefante en sus representaciones.
Sobre el dios Kartikeya, hay varias versiones de historias, pero la más contada es que era conocido por ser el Dios de la Guerra, que luchaba como un gran guerrero. Como parte de la numerología india, el número 6 aparece constantemente en las representaciones de este dios. Así, son seis los vicios a los que el hombre puede ser susceptible: el sexo, la ira, la pasión, los celos, la codicia y el ego.
Simbologías del Dios Shiva
La historia de Shiva está impregnada de hechos que involucraron aventuras y situaciones que permiten crear una imagen de sus características, con aptitudes y capacidades, y de la forma en que vivió y transmitió sus conocimientos a la humanidad. Consulta una selección de las simbologías marcadas por el Dios Shiva en la historia y entiende más sobre sus motivos y enseñanzas.
La trishula
En la mayoría de las ilustraciones que representan a Shiva, éste aparece sosteniendo un tridente o está presente en la imagen. Este tridente se conoce como trishula, un arma que porta Shiva y que tiene como simbolismo el número 3. Por lo tanto, cada diente de su tridente representa una de las cualidades de la materia, a saber: existencia, firmeza y equilibrio.
En otras literaturas, la trishula también representa el pasado, el presente y el futuro. Otros dioses de la mitología india también llevan un tridente, que representa su capacidad para luchar y enfrentarse a los desafíos, ya sean terrenales o de otro tipo.
La serpiente
La serpiente, enviada por el rey de los demonios para acabar con Shiva, es domada con el tridente (trishula). A lo largo de su historia, Shiva lleva la serpiente al cuello como un adorno, un ornamento. El uso de la serpiente con este fin está directamente relacionado con la representación del ego y la necesidad de exhibir los propios logros y realizaciones.
En otros pasajes, el hecho de que la serpiente sea una cobra mortal y sea derrotada por Shiva, denota el simbolismo de la inmortalidad del Dios, pues una vez que derrotó y aprisionó a la bestia, obtuvo la capacidad de ser inmortal.
Jata
Según el simbolismo hindú, el cabello de Shiva controla las aguas de este río, llevando su pureza a todos los indios.
Lingam
Encontrado en un solo lugar del mundo, el río Narmada, el Lingam es una piedra sagrada dentro de la religión india. El río donde se encuentra divide los límites entre el norte y el sur de la India. Tiene colores que van desde el marrón, el gris y el rojo con pequeñas manchas. Además, la palabra "Lingam" es un símbolo que está vinculado al Dios Shiva.
Así, los indios creen que la piedra agudiza la vivacidad y los niveles de las energías de la fertilidad. Por lo tanto, la piedra también representa la sexualidad dentro de las creencias indias, sin hacer referencia al sexo, sino más bien a la atracción que puede existir entre dos personas y cómo la realizan.
Damaru
El damaru, en la cultura india, es un tambor con forma de reloj de arena que se utiliza habitualmente en las celebraciones de la India y el Tíbet.
Según la leyenda, es mediante el uso de un damaru como el Dios Shiva compone el ritmo del universo, como en una danza. Por este pasaje, Shiva es también conocido como el Dios de la Danza. Si alguna vez deja de tocar el instrumento, para afinarlo o recuperar el ritmo, el universo se desmorona, esperando el regreso de la sinfonía.
Fuego
El fuego es un elemento poderoso que representa la alteración o conversión, por lo que está directamente vinculado a Shiva. En la literatura india, nada que pase por el poder del fuego permanecerá igual. Como ejemplos: la comida que, al pasar por el fuego, se modifica y puede cambiar de color, forma, consistencia y sabor, también el agua que, al pasar por el fuego puede evaporarse.
La relación del fuego con Shiva radica en el concepto de transformación, ya que es el Dios que invita a cambiar a todos los que le siguen. En el yoga, el fuego está representado por el calor del cuerpo que, cuando se produce, puede ser canalizado para liberar los propios límites del cuerpo y ayudar en el proceso de transmutación.
Nandi
Según la historia, la madre de todas las vacas dio a luz a muchas otras vacas blancas, en una cantidad absurda. La leche procedente de todas las vacas inundó la casa de Shiva que, perturbado durante sus meditaciones, las golpeó con el poder de su tercer ojo.
Para calmar la ira de Shiva, se le ofreció un toro perfecto y reconocido como un ejemplar único y maravilloso, Nandi, hijo de la madre de todas las vacas, por lo que el toro representa simbólicamente la protección para todos los demás animales.
La luna creciente
Las fases cambiantes de la luna representan el ciclo constante de la naturaleza y cómo impregna los continuos cambios a los que todos los humanos somos susceptibles. En las imágenes que representan a Shiva, se puede observar una luna creciente en su pelo. Este uso significa que Shiva está más allá de las emociones y los estados de ánimo que pueden ser influenciados por este astro.
Nataraja
La palabra Nataraja significa "Rey de la Danza". Así, mediante su danza, Shiva es capaz de crear, mantener y destruir el universo. Mediante el uso del damaru su tambor, Shiva baila marcando el movimiento eterno del universo. Según la leyenda, Nataraja realiza su danza bailando sobre un demonio enano, lo que representa la superación de la oscuridad y el posible paso de lo divino a lo material.
Pashupati
El nombre de Pashupati se da a una de las encarnaciones del Dios Shiva, adorado principalmente en Nepal. En esta encarnación, el Dios habría vuelto como el señor de todos los animales, representado con tres cabezas para poder ser consciente del pasado, el presente y el futuro. Por ello, la imagen de Pashupati también está sentada con las piernas cruzadas en posición de meditación.
Ardhanaríshvara
En muchas imágenes, Shiva es representado como un hombre, pero es posible ver que su lado derecho es más masculino que su lado izquierdo, debido a la presencia de la serpiente, el tridente y otros artefactos más cercanos al universo masculino.
Por lo tanto, la palabra ardhanaríshvara representa la unión de estos dos aspectos, entre los principios masculino y femenino.
Más información sobre el dios Shiva
Shiva está presente en varias culturas, pero con representaciones diferentes. En la cultura asiática, el Dios Shiva aparece con detalles específicos y, normalmente, está desnudo. Aunque se le sigue representando con varios brazos, aparece con el pelo recogido en un moño o con un copete.
La luna creciente, que en las representaciones indias está sujeta al cabello, aparece en algunas culturas como tocado junto con una calavera. Lleva brazaletes en las muñecas y un collar de serpientes en el cuello. Cuando está de pie, aparece con una sola pierna, la izquierda, y la derecha está doblada por delante de la rodilla.
En cada cultura, la composición de la imagen del Dios Shiva y sus acciones conllevan simbologías que sirven de guía para las personas que siguen y estudian sus enseñanzas. Sigue leyendo y conoce otros pasajes de la vida de este Dios en otras culturas, aprende su oración y su mantra ¡Compruébalo!
La Gran Noche de Shiva
La gran noche de Shiva es una fiesta que celebran todos los años los habitantes de la cultura india. Tiene lugar la decimotercera noche del calendario indio. Es una noche de oraciones, mantras y vigilia. Los hindúes practican la espiritualidad y realizan una gran celebración, especialmente en los templos que rinden culto al Dios Shiva.
¿Cómo conectar con el Dios Shiva?
La meditación es una buena forma de conectar con las enseñanzas del Dios Shiva. No es necesario estar en un templo o en un lugar sagrado en la cultura india para esta conexión, sólo hay que crear un entorno propio. Según la leyenda, la conexión debe comenzar con el Dios Ganesha, que abrirá los caminos de acceso a Shiva.
Por lo tanto, vale la pena aprender mantras y oraciones a Ganesha y elevar tus pensamientos a través de la meditación. Así que, practica la meditación despejando tus pensamientos y dirigiendo tu mente hacia la transformación y todas las enseñanzas de Shiva, ya que la práctica del yoga y la meditación ayuda a conectar con las energías de este Dios.
Altar para el Dios Shiva
Para crear un altar para adorar o rendir homenaje al Dios Shiva, tendrás que elegir un buen espacio en tu casa donde sepas que las energías fluirán. Puede ser en un rincón de tu dormitorio o en un espacio privado del salón. Selecciona objetos que tengan sentido para ti y que conecten con tu intención.
Además, puedes elegir una estatua de Ganesha y también una del Dios Shiva, varillas de incienso y campanas o pequeños instrumentos musicales que te conecten con la música del universo. Recuerda encender el altar con una lámpara o incluso con velas que, una vez encendidas, deben apagarse solas, sin tu intervención.
Por lo tanto, reserva buenos momentos para estar en tu altar y despejar tu mente, buscando la guía de Ganesha y las enseñanzas de Shiva. Practica la meditación en tu altar y haz que este entorno se complete cada vez más con energías positivas y buenas vibraciones.
Mantra
Los mantras son palabras o sílabas combinadas que, al ser pronunciadas constantemente, pueden ayudar al poder de concentración de la mente e interactuar con las energías de los dioses. El mantra más utilizado para conectar con el Dios Shiva es OM NAMAH SHIVAYA, que significa: "Yo honro al Señor Shiva".
Se utiliza para demostrar al Dios Shiva que se reconoce su poder y que se está en reverencia ante todo su poder, con la bienvenida a la vida de su adoración. Por lo tanto, utiliza este mantra cuando estés ante su altar y medita repitiéndolo en voz alta o mentalmente.
Oración al Dios Shiva
Hoy me uno a la grandeza de Shiva para que me dirija.
Al poder de Shiva para que me proteja.
A la sabiduría de Shiva para que me ilumine.
Al amor de Shiva para liberarme.
Al ojo de Shiva para discernir.
En el oído de Shiva para escuchar.
La palabra de Shiva para aclarar y crear.
A la llama de Shiva para purificar.
La mano de Shiva para cobijarme.
Al escudo de Shiva para que me defienda de las trampas, tentaciones y vicios.
Con su trishula de protección frente a mí, a mi espalda, a mi derecha, a mi izquierda, por encima de mi cabeza y por debajo de mis pies. Con la gracia de los devas y devis, estoy bajo la protección del Señor Shiva".
Shiva también es conocido como destructor y regenerador de la energía vital.
Al mismo tiempo que se le reconoce como creador por estar en la trinidad como tercer dios, Shiva tiene la mirada suprema, pues conoce la creación, sabe cómo se ha mantenido, organizado y es capaz de destruirla para promover las transformaciones y cambios necesarios para un universo mejor.
Por tener esta visión completa, Shiva también es conocido por ser capaz de acabar con la energía vital, pero siempre con la intención de regenerarla, dejándola en un estado aún más fuerte. Además, la metáfora de su acción con el universo puede aplicarse a los problemas de las personas y a todo lo que impregna el mundo terrenal.
Ante los problemas, a través de la meditación, las oraciones y la espiritualidad, el ser humano es capaz de conectar con las fuerzas creativas y convertirlas para que puedan transformarse. Los pensamientos y las actitudes positivas son grandes impulsores, pero sobre todo, la creencia en uno mismo y en su poder de transformación, es la principal enseñanza del Dios Shiva. ¡Piensa en todo esto y practica!