Tabla de contenido
¿Qué es el biomagnetismo?
Aunque tiene algunas similitudes con los tratamientos tradicionales, el biomagnetismo no está vinculado a la medicina. Su finalidad es mantener el bienestar de las personas y un cierto equilibrio bioenergético.
La terapia se realiza mediante el uso de imanes que, colocados en determinadas partes del cuerpo, ayudan a combatir las anomalías.
Los imanes son capaces de neutralizar y eliminar el ácido presente en el cuerpo. Por lo tanto, sirve para desintoxicar. También hace que una persona libere traumas psicológicos que están presentes en el cuerpo.
Por lo tanto, su acción se dirige no sólo al autocontrol interno, sino también al pH (potencial de hidrógeno). Si quieres saber más sobre las funcionalidades del biomagnetismo, ¡lee el artículo!
Curiosidades sobre el biomagnetismo
Al ser un procedimiento indoloro, el biomagnetismo no necesita ningún tipo de máquina para los tratamientos. Las primeras sesiones son esenciales para comprender qué partes del cuerpo requieren atención y necesitan equilibrio, y suelen durar alrededor de una hora.
Para las personas con un mayor grado de complejidad (enfermedades crónicas), sólo son posibles cinco sesiones.
El pH alcalino debe ser de 7,35-7,45. Cuando no está en esta optimización, pueden producirse enfermedades. Siga leyendo el artículo para saber más sobre el origen, el descubrimiento, las aplicaciones, etc.
¿Cómo funciona el biomagnetismo?
Cuando hay una acumulación desequilibrada de pH, esto causa síntomas y otras condiciones incómodas. Con el uso de biomagnetismo y magnetismo, es posible restaurar todo lo que está desordenado en el cuerpo humano. Por lo tanto, la renovación de todos los microorganismos tales como virus, hongos y parásitos que se reestructuran.
El tratamiento no es tan fácil como muchos imaginan. Para que sea eficaz, debe utilizarse de forma precisa y correcta. Mediante los imanes, se golpean zonas específicas del cuerpo y a gran intensidad. Con el equilibrio del pH, el cuerpo puede regularizarse y generar la curación. Los agentes patógenos no sobreviven en un cuerpo con células sanas.
La curación tiene lugar a través del alto nivel de pH. Es a partir del bienestar que alcanza su máximo nivel de eficacia. Antes de que comience el tratamiento, los microorganismos patógenos provocan distorsiones a través del alto índice de acidez de los órganos. Es a partir de éstos que se sostiene el sistema bioenergético.
Son muchos los resultados positivos que puede ofrecer el biomagnetismo. Entre ellos, la estimulación funcional del sistema inmunitario, el aumento de la oxigenación y la circulación, así como la normalización de algún tipo de inflamación interna.
Origen del biomagnetismo
El biomagnetismo surgió a partir de un efecto estudiado por el científico estadounidense Albert Rou Davis en 1930. Décadas más tarde, Walter C Rawls Jr realizó experimentos utilizando imanes en el sistema biológico, lo que comenzó a utilizarse como método para diagnosticar enfermedades específicas.
En 1970 un científico de la NASA llamado Richard Broeringmeyer notó que algunos astronautas tenían un acortamiento en una de sus piernas y esto provenía de las misiones en el espacio. Con mucha investigación, descubrió que con el uso de un campo magnético era posible solucionar tal problema causado a los profesionales.
Desde su origen, el procedimiento comenzó a ser reconocido y utilizado como una forma de localizar los puntos energéticos presentes en el cuerpo humano que pueden causar enfermedades. Los imanes se utilizan de forma pasiva y no se electrifican, sino que se aplican en las más diversas zonas del cuerpo como si su acción se convirtiera en un escaneo biomagnético.
Si siente cansancio y dolor en el cuerpo, podría tratarse del síndrome de cierta deficiencia en el campo electromagnético. No dude en buscar ayuda profesional e intentar comprender la causa de esta rigidez. Muchas personas no dan verdadera importancia a estos signos de precariedad y pueden intensificarse.
El descubrimiento del biomagnetismo
En 1980 se empezaron a profundizar los estudios sobre el biomagnetismo gracias a Isaac Goiz Durán, quien descubrió los verdaderos principios del magnetismo y el biomagnetismo, dando su nombre como uno de los verdaderos pioneros del procedimiento. Hoy en día, esta técnica se utiliza en México, Estados Unidos, Ecuador, Chile, Argentina, Italia, España, Portugal y también es conocida en Brasil.
Según él, se pueden recuperar estados metabólicos de forma saludable a partir del uso de campos magnéticos de intensidad media, producidos de 1.000 a 4.000 Gauss. Haciendo las aplicaciones por pares en determinadas partes del cuerpo, el nombre que se les da es Pares Biomagnéticos.
Esta funcionalidad se denomina biofeedback, donde la magnitud se complementa indicando homeostasis. Los descubrimientos de Duran no acaban aquí. En 1993 descubrió que los campos magnéticos se podían utilizar a través de la fuerza mental y esto se hizo muy conocido como Bioenergía. En los 90 también descubrió la Teleenergética.
La curación se hizo por primera vez a distancia y el tratamiento devolvió la fuerza mental al paciente. Con más de 26 años desde que descubrió el Par Biomagnético, es posible incluir unos 350 Pares Magnéticos que localizan y curan muchas enfermedades.
Ventajas del biomagnetismo
Entre las eficacias del tratamiento con biomagnetismo se encuentran mejoras en ciática, dolor lumbar, migraña, acidez, respiración, asma, tos crónica, entre otras. Las sesiones pueden ayudar incluso en la enfermedad de Lyme, por lo que este tratamiento puede llevar más tiempo.
Si antes estas personas tenían que estar recluidas a causa de la fibromialgia, ahora pueden llevar una vida normal. Como cada caso es diferente, las personas que utilizan este método observan diferencias y mejoras.
Incluso para los que no están enfermos el biomagnetismo puede ser muy útil. Cualquier persona puede tener un pH desequilibrado e inflamado según la acidez y el bajo grado del organismo.
El método puede detectar y corregir todo lo que no esté en perfecta armonía en el cuerpo humano. No hay contraindicaciones para utilizar el biomagnetismo, pero es necesario estar alerta.
Las personas que utilizan insulina, marcapasos o incluso algún tipo de dispositivo en el cuerpo, puede hacer el tratamiento, pero sin el uso del imán. Esto es debido al hecho de que los imanes pueden descargar o incluso dañar a otra esfera del cuerpo. En el mejor de los casos, buscar un profesional cualificado está indicado.
Aplicaciones del biomagnetismo
Las aplicaciones con biomagnetismo sirven para equilibrar los cambios de pH, eliminando los síntomas y previniendo el desarrollo de muchas enfermedades. A partir de las aplicaciones, se van eliminando los agentes patógenos y facilitando la recuperación de ciertas zonas que estaban afectadas. Los imanes tienen cargas positivas y negativas. Ambas tienen la finalidad de igualar el pH.
Normalizando el sistema orgánico, el biomagnetismo también restaura y desintoxica las inflamaciones, liberando las cargas emocionales que se encuentran en el interior del cuerpo. A través de su ayuda se reintegra el equilibrio bioenergético celular, no siendo invasivo para el organismo.
Las sesiones comienzan con una revisión del historial y el informe del individuo. Durante todo el periodo de seguimiento, se pondrán de relieve todas las alteraciones, y así hasta la última sesión.
Se realizará una evaluación kinesiológica para analizar cuáles son los desequilibrios dentro del cuerpo. Justo después de la identificación el profesional colocará los pares de imanes en una intensidad de 1.000 Gauss.
Una vez colocados todos ellos en los lugares específicos, deben permanecer en el cuerpo del individuo durante un periodo de tiempo concreto. Este periodo se determina en función de la latitud geográfica según el lugar donde se realice el método. Al crear el equilibrio necesario para los patógenos, el cuerpo empezará a eliminarlos todos.
La importancia del pH de nuestro cuerpo
Mantener el cuerpo sano es importante porque el pH necesita estar equilibrado, por lo que es a través del biomagnetismo que es posible mantenerlo con acidez y alcalinidad en perfecta armonía. Cuando el pH está por encima de 7, es probable que esté protegiendo al cuerpo de diversas enfermedades.
Cuando se acumula, el organismo puede generar síndromes y síntomas desagradables. Al restablecer el pH es posible dejarlo equilibrado para crear defensas naturales de modo que el microorganismo esté bajo control según se trate de virus, parásitos, hongos y bacterias.
Con su equilibrio es posible restaurar los músculos, los pulmones, el páncreas, las articulaciones, etc. La neutralidad es ideal para mantener un pH sano. Con la alcalinidad en equilibrio el cuerpo está preparado para mantenerse de forma sana y eficaz. Los patógenos se potencian en todo tipo de enfermedades.
Antes de iniciar el método, su presencia estaba distorsionando los niveles necesarios de alcalinidad, que es lo que sustenta la bioenergética. Por lo tanto, la curación sólo comienza cuando el pH alcanza un determinado nivel para mantener el cuerpo humano de forma organizada, generando bienestar.
¡Atención! El biomagnetismo es una terapia alternativa
En primer lugar, hay que destacar que el biomagnetismo no es algo sobrenatural o místico, sino una terapia alternativa. El uso de imanes existe desde hace muchos siglos y siempre ha sido un método activo para la curación o prevención de enfermedades. Fue en 1980 cuando el biomagnetismo fue regularizado por el médico mexicano Isaac Goiz Durán.
Muchos profesionales de todo el mundo aplican el biomagnetismo de forma cuidadosa y refinada, entre ellos psicólogos, médicos y terapeutas biomagnéticos.
Todo el mundo ve este método como una segunda opción para tratar muchos problemas de salud. Debido al uso de técnicas invasivas y con sustancias químicas, es indiscriminado. Es importante destacar este tipo de terapia porque muchos de los métodos tradicionales no actúan de la misma manera que ésta en el cuerpo humano.
En cuanto al número de terapias necesarias para resolver determinadas enfermedades, variará de un paciente a otro.
Cuando se alcanza el equilibrio, la recomendación es cada 3 ó 4 meses, por lo que será el especialista quien diga si el individuo ha alcanzado el bienestar o no.
¿Existen contraindicaciones o efectos secundarios del biomagnetismo?
No existen contraindicaciones ni efectos secundarios en relación con el biomagnetismo. Lo que sí se puede sentir poco después de las sesiones son dolores o agotamiento entre uno y dos días, ya que las terapias provocan la desintoxicación necesaria para deshacerse de las enfermedades detectadas.
Es básicamente lo mismo que ir al gimnasio durante las primeras semanas. Sólo te sentirás cómodo cuando tengas una rutina. Para aliviar estos síntomas, necesitas dormir bien y descansar durante dos días. Además, beber líquidos y comer alimentos sanos y adecuados son los métodos precisos para deshacerte de estas molestias.
Siguiendo estas pautas, las toxinas y las inflamaciones abandonarán rápidamente el cuerpo. Si uno se llena de los campos magnéticos que producen las células y los demás sistemas, alcanzará su propio equilibrio necesario. De este modo, el cuerpo funcionará bien.
Muchos profesionales señalan que el tratamiento es eficaz y puede aplicarse también a ancianos y recién nacidos. Sólo se desaconseja a quienes se sometan a radioterapia, quimioterapia o a personas que utilicen marcapasos y estén embarazadas.
¿Es lo mismo biomagnetismo que magnetoterapia?
No. El biomagnetismo no tiene ninguna similitud con la magnetoterapia, por lo que este tipo de terapia sólo sirve para lesiones establecidas en dos direcciones: el Polo Sur como analgésico y el Polo Norte como antiinflamatorio.
Se utiliza con el propósito de baja intensidad, se recomienda entre 100 y 500 Gauss. Además, el período de aplicación es durante mucho tiempo, y esto es durante días y horas, en los lugares específicos que necesitan tratamiento. La diferencia entre ellos es básicamente magnetoterapia y biomagnetismo.
El biomagnetismo y los pares bioenergéticos forman parte del campo de los fenómenos vibracionales. No están vinculados a la medicina porque no tienen la función de curar enfermedades que requieran una medicación adecuada y autorizada. Su duración oscila entre 15 y 90 minutos y depende también de la ubicación del individuo y de si está en relación con el ecuador.
Las personas que pueden practicar y aplicar el biomagnetismo necesitan estar autorizadas. No pueden diagnosticar ni indicar problemas psicológicos y médicos, ni tampoco afirmar, tratar, prevenir o curar los síntomas presentados.
La función de estos profesionales es asesorar sobre el uso de las bioenergías y el biofeedback, por lo que sólo están autorizados a indicar soluciones beneficiosas y terapéuticas para las necesidades de los pacientes.