Consideraciones generales sobre el embarazo psicológico

Tanto si se trata de mujeres que tienen un deseo ardiente de ser madres como si tienen mucho miedo de tener un hijo, el embarazo psicológico es un fenómeno que puede afectar a cualquier persona, incluso a los hombres, siempre que tengan una predisposición a ello. Aunque es poco frecuente, la afección puede darse y seguir presentando todos los síntomas de un embarazo.

Es importante destacar que el embarazo psicológico no es una enfermedad en sí misma, sino una condición clínica que requiere atención y cuidados para las personas que lo desarrollan. Existe un tratamiento para cuidar la salud emocional de quienes se enfrentan a esta situación, y la acogida es fundamental.

De hecho, las mujeres creen que están realmente embarazadas y pueden demostrarlo con los síntomas de su cuerpo. Por eso, al informar de la ausencia del bebé en el vientre, el médico tiene que ser cuidadoso. Aprende más sobre esta condición psicológica en los temas de abajo!

Comprender el embarazo psicológico

También llamado pseudociesis y embarazo fantasma, el embarazo psicológico es un cuadro clínico que requiere algunos cuidados y mucha atención. Consulta los temas siguientes y aprende más sobre este raro fenómeno.

¿Qué es el embarazo psicológico?

El embarazo psicológico es un estado en el que la mujer siente que está embarazada, pero en realidad no lo está. Sin embargo, el organismo presenta varios síntomas típicos de una mujer embarazada, sin que el óvulo haya sido fecundado por un espermatozoide, es decir, no hay saco embrionario, ni siquiera un embrión en el útero.

Aunque el útero esté vacío, el cuerpo produce las hormonas típicas del embarazo, como la prolactina y los estrógenos. La mujer siente que el bebé da patadas dentro de su vientre y, en los casos más graves, puede incluso salirle leche de los pechos. Por tanto, este estado psicológico no es una invención ni una mentira de la persona, sino que cree que está embarazada.

¿Cuáles son las causas más comunes del embarazo psicológico?

El embarazo psicológico es una condición muy rara. Suele ocurrir en uno de cada 20 o 25 mil embarazos, por lo que no se sabe mucho sobre las causas exactas de esta condición. Sin embargo, se sabe que la condición suele ser desencadenada por problemas psicológicos y emocionales, especialmente en personas emocionalmente frágiles.

Las causas más comunes que conducen a este tipo de embarazo son: baja autoestima, miedo intenso o fuerte deseo de quedarse embarazada, demasiada presión para tener un bebé, fuertes factores de estrés, abortos involuntarios repetidos o inseguridad en la relación de pareja. Las personas que han sufrido abusos sexuales en su infancia o que padecen depresión también pueden caer en este estado.

¿Se puede curar el embarazo psicológico?

Por lo general, la condición de embarazo psicológico termina con resultados negativos de las pruebas y la ausencia del feto en el útero, mostrada por la ecografía. En estos casos, la mujer puede sufrir y pasar por el duelo, pero después del tratamiento con los profesionales adecuados, supera la condición.

Sin embargo, en los casos más graves, la mujer simplemente no acepta estos resultados y se queda con los síntomas del embarazo. Puede ponerse de parto, con contracciones y dolores reales, y cuando nota que no hay ningún bebé en su vientre, puede alegar que hubo un aborto espontáneo o que algo salió mal con el feto.

¿Pueden los hombres sufrir un embarazo psicológico?

Aunque el embarazo psicológico se da más en las mujeres, los hombres también pueden padecerlo. Sin embargo, estos casos en los que el hombre se queda "embarazado" se denominan embarazo simpático o síndrome de Couvarde, y experimenta síntomas similares a los de un embarazo sano, como cambios hormonales, náuseas, alteraciones del sueño y aumento de peso.

Esta afección suele producirse en el primer embarazo de la pareja y puede tener varios motivos, desde un trauma psicológico hasta un simple nerviosismo. En los casos más extremos, el hombre puede sentir dolores de parto, hemorragias nasales y depresión posparto. Es fundamental el tratamiento con psicólogos para evaluar la afección.

Factores de riesgo del embarazo psicológico

No hay manera de predecir la aparición de un embarazo psicológico. Aunque se da más en mujeres emocionalmente frágiles, la condición puede surgir en cualquier persona. Sin embargo, hay algunos factores que pueden desencadenar el cuadro clínico. Conozca algunos de ellos a continuación.

Abortos espontáneos o infertilidad

Los abortos espontáneos o repetidos y los problemas de infertilidad pueden desencadenar un embarazo psicológico. Esto ocurre porque el dolor de no poder tener un hijo y la pena de perderlo son tan grandes que la mujer crea una realidad paralela en su mente para intentar sobrellevar la intensa tristeza.

En los casos de aborto espontáneo, es muy importante que la mujer busque un psicólogo para que pueda elaborar su duelo. En las situaciones de infertilidad, es fundamental buscar un ginecólogo para revertir la situación. Hoy en día, hay muchos métodos que pueden tratar la infertilidad y otras técnicas para generar un hijo.

Presión para ser madres

La presión para ser madre es muy común en las familias tradicionales y se ve reforzada por el papel social de la mujer que impera en algunas sociedades. Tanto es así que si una mujer afirma que no desea tener hijos, se encuentra con miradas críticas y apenas es comprendida o aceptada.

Ante todo esto, algunas personas no pueden hacer frente a la situación, lo que puede culminar en un embarazo psicológico. En un intento de cumplir las expectativas de los demás, normalmente de las personas a las que quiere, la mujer cree que está embarazada y así ser aceptada.

Para que esta situación no se produzca, es importante trabajar la presión psicológica, reforzando tu posición ante la gente.

Muerte de niños durante el parto

La muerte de un hijo durante el parto tiene la capacidad de provocar un intenso sufrimiento en la vida de la mujer. Para hacer frente a este dolor, algunas pueden desencadenar el marco del embarazo psicológico, incluso para intentar sustituir al bebé que se ha ido.

Después de la muerte, es fundamental que esta mujer se someta a un tratamiento psicológico, aunque parezca estar bien emocionalmente. Como el dolor es tan grande, se puede crear un rechazo de la realidad, haciendo creer a los demás que la mujer está bien, cuando, en realidad, no lo está.

Los síntomas del embarazo psicológico

El cuerpo de las personas que experimentan un embarazo psicológico experimenta las mismas transformaciones que las que están realmente embarazadas. El único hecho que atestigua esta condición es la ausencia de un bebé en el vientre materno. ¡Conoce a continuación algunos síntomas de este tipo de embarazo!

Sentir que el bebé da patadas o se mueve en la barriga

Sentir que el bebé da patadas o se mueve en el vientre es un síntoma que se da en los casos más graves de embarazo psicológico. De hecho, la mujer siente que algo se mueve dentro de su vientre y se imagina que son patadas de un bebé. Sólo que, a veces, estos movimientos pueden ser sólo gases o fuertes dolores menstruales.

Debido a la posibilidad de que se trate de otra condición clínica, es importante que, tras el diagnóstico de embarazo psicológico, se realice una evaluación completa del cuerpo para descartar otros problemas de salud. En cualquier caso, si la mujer llega a ese punto de sentir patadas del bebé, es una señal de que el caso ya es bastante grave.

Expansión abdominal

Después de algunas semanas de embarazo, el abdomen tiende a expandirse como una clara confirmación de la presencia de un bebé en el vientre. Sin embargo, condiciones como la inflamación de la vejiga, los gases, las heces, el aumento de peso, entre otras razones, pueden hinchar la región abdominal, lo cual es una evidencia fértil para que la mujer con embarazo psicológico crea que está embarazada.

Por lo general, todas las afecciones mencionadas desaparecen en pocos días, a excepción del aumento de peso, que requiere un cambio en la dieta. Por este motivo, si estos síntomas persisten incluso después de que la mujer descubra que no está embarazada, es fundamental acudir al médico para tratar la afección.

Retraso o irregularidad de la menstruación

Uno de los primeros signos de embarazo es el retraso de la menstruación o la irregularidad del ciclo menstrual. Debido a este síntoma, puede surgir el embarazo psicológico, generando la creencia de que realmente hay un bebé en el vientre. Aunque un test de beta HCG o una prueba de farmacia indique la negatividad en el resultado, la mujer sigue creyendo en su embarazo.

Por ello, es importante prestar atención a este síntoma, ya que otras condiciones clínicas pueden originar la irregularidad en la menstruación, como la presencia de quistes o, en casos graves, la aparición de endometriosis, por lo que si este problema continúa, incluso después del diagnóstico de falso embarazo, se debe consultar al ginecólogo.

Otros síntomas comunes del embarazo psicológico

Además de sentir que el bebé se mueve en el vientre, de experimentar una expansión abdominal y de tener un retraso en la menstruación, hay otros síntomas muy comunes al embarazo psicológico, como las náuseas y el aumento del tamaño de los pechos, por ejemplo. En verdad, el cuerpo se está preparando para recibir al bebé dentro del vientre.

En algunos casos, puede producirse leche de los pechos, y la mujer puede experimentar contracciones y fuertes dolores típicos del trabajo de parto. En los casos más graves, puede llegar a ponerse de parto. Dado que los síntomas se producen, es importante escuchar a quienes están pasando por esto y ofrecerles todo el apoyo posible.

Tratamiento y consejos para minimizar los síntomas

No hay ninguna complejidad en el tratamiento del embarazo psicológico. Sin embargo, teniendo en cuenta el cuidado que se debe tener con los pacientes de esta condición, es necesario redoblar la atención. Compruebe a continuación cómo se hace el diagnóstico del cuadro clínico, cómo debe ser el tratamiento y otros factores importantes en esta condición!

El diagnóstico

En el estado de embarazo psicológico, las pruebas comunes como la beta HCG o las pruebas de farmacia dan un resultado negativo para el embarazo, ya que la hormona responsable de dar el resultado es producida por las células precursoras de la placenta, que son inexistentes debido a la ausencia del embrión.

La única prueba que diagnostica la condición psicológica es la ecografía del vientre, que muestra un útero vacío y no muestra los signos vitales del bebé.

En este examen que proporciona la certeza del embarazo psicológico, es muy importante que tanto el médico como las personas cercanas a ella sean cuidadosos en su trato con la mujer. En algunos casos, ella puede desear ardientemente estar embarazada y pronto, la noticia puede ser un gran shock.

El tratamiento

Tras el diagnóstico con la ecografía, la mujer necesita someterse a un tratamiento psicológico para que pueda elaborar la noticia, ya que es un duelo al que se enfrentará.

Incluso en los casos en los que el embarazo psicológico fue originado por un miedo intenso a quedarse embarazada, el hecho de sentir los síntomas puede haber generado en la mujer el deseo de tener un hijo, por lo que el análisis por parte de los psicólogos es fundamental para aceptar y superar la noticia, así como para verificar qué originó la afección y, de esta forma, tratarla.

Además, también se puede solicitar una evaluación psiquiátrica para analizar si hay algo más grave, como estados psicóticos, por ejemplo. En cualquier caso, el tratamiento puede variar y depender de los resultados de las evaluaciones.

Apoyo profesional

La mujer con embarazo psicológico no miente ni se inventa la situación, sino que cree que está embarazada y sus síntomas corporales lo demuestran.

Por lo tanto, las personas que pasan por esta condición deben contar con un equipo médico atento que pueda proporcionar toda la atención y ayuda, tanto a los pacientes como a sus familiares. El apoyo profesional es de suma importancia para que la mujer se sienta acogida y comprendida, ya que, al fin y al cabo, son los médicos quienes darán la noticia de que no hay un bebé en el vientre.

Controlar la ansiedad y el deseo de quedarse embarazada

Son muchas las razones que pueden llevar a un embarazo psicológico, pero la principal, que suele darse en la mayoría de los casos, es el intenso deseo de quedarse embarazada. Como la mujer está tan ansiosa por tener un hijo, se vuelve extremadamente ansiosa y puede producir los mismos síntomas que un embarazo normal.

Con la ayuda de profesionales cualificados, se reduce la ansiedad y se estabiliza la mente de la mujer para entender el momento adecuado para tener un hijo.

Tratamientos para la infertilidad o la menopausia precoz

En algunos casos, el embarazo psicológico puede producirse como consecuencia de una afección médica, como la infertilidad o la menopausia precoz. En estas situaciones, existe un intenso deseo de quedarse embarazada, pero el proceso se ve obstaculizado a causa de estos problemas, que pueden desencadenar este raro tipo de embarazo.

Hoy en día, con el avance de la ciencia, existen varios tipos de tratamientos para ayudar a las mujeres a quedarse embarazadas. Es fundamental buscar un médico ginecólogo especialista en el tema para que realice todos los cuidados y prepare el cuerpo de la mujer para que pueda, efectivamente, dar a luz a un bebé.

Resolución de problemas en la relación

En estas situaciones, las mujeres creen que con la llegada de un bebé se pueden resolver todos los problemas de su relación.

Piensan que por la fragilidad de un cuerpo que genera un bebé, podrán atraer la atención de su pareja, eliminando los conflictos. Para que este tipo de embarazo desaparezca, es indispensable resolver los problemas de relación.

Dependiendo de la situación, ambos pueden acudir a una terapia de pareja para resolver los problemas. Además, la mujer también necesita una terapia individual para trabajar sus conflictos personales y afrontar los resultados del tratamiento junto con su pareja.

Las posibles complicaciones del embarazo psicológico

Como cualquier condición clínica, el embarazo psicológico puede evolucionar hacia otras complicaciones. En algunos casos, la mujer puede desarrollar problemas psiquiátricos como psicosis, trastorno de ansiedad, depresión, etc. Estos estados pueden comenzar al recibir la noticia de que no hay un bebé en el vientre, generando una intensa angustia.

Si se producen estas complicaciones, es indispensable la ayuda de un tratamiento psiquiátrico y psicológico. A veces puede ser necesario el uso de medicamentos para estabilizar el estado. Además, también es importante que, en todo momento, la mujer reciba el apoyo adecuado y cuente con personas de confianza que estén a su lado.

Si identificas los síntomas de un embarazo psicológico, ¡no dudes en buscar apoyo!

Aunque el embarazo psicológico es más común entre las mujeres emocionalmente frágiles, la condición puede ocurrirle a cualquiera. En este caso, no hay que desesperarse ni culparse, lo mejor es buscar ayuda para tratar la condición y cuidar tu cuerpo para recibir un bebé, si es que lo deseas.

Si notas los síntomas de un embarazo psicológico, pide ayuda a personas de confianza para que te acompañen en este proceso. También es importante que busques buenos profesionales que te ayuden en el tratamiento. Recuerda que la evaluación psicológica es fundamental para ayudarte a entender los problemas que originaron este estado.

¡Con tus emociones reforzadas, los síntomas tratados y tu cuerpo debidamente cuidado, puedes realmente gestar un bebé en tu vientre y quedarte embarazada de forma sana y equilibrada!